Curación de un cáncer maxilofacial: el milagro de la beatificación del P. Ormières
MADRID, 20 Abr. 17 / 08:57 am (ACI).- Celina Sánchez del Río es religiosa de las Hermanas del Ángel de la Guarda, tiene 80 años y en 2001 le diagnosticaron un carcinoma maxilofacial para el que no había cura, pero su fe en la oración y la intercesión del P. Luis Ormières hizo que el cáncer desapareciera de manera total y milagrosa.
El P. Luis Ormières, fundador de la Congregación de Hermanas del Ángel de la Guarda, será beatificado el 22 de abril en la catedral de Oviedo (España), a pocos kilómetros de la ciudad de Gijón por el Cardenal Angelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.
Según cuenta la hermana Celina Sánchez, en la web de las Hermanas del Ángel de la Guarda, desde pequeña respiró el espíritu de la congregación ya que fue alumna del colegio que esta tiene en Gijón (España). Allí descubrió su vocación y posteriormente fue profesora en el centro durante 17 años.
El colegio de las Hermanas del Ángel de la Guarda en Gijón (España) es muy especial porque allí murió en 1890 el P. Luis Ormières, fundador de la Congregación de las Hermanas del Santo Ángel.
En el año 2001, cuando la hermana Celina vivía en el municipio español de Palencia, le diagnosticaron un carcinoma maxilofacial. “En cuanto empecé a encontrarme mal me encomendé a él (P. Luis Ormières) junto a toda la congregación. Oramos mucho”, asegura la religiosa.
Durante seis años, tanto la hermana Celina como toda su comunidad rezaron sin cansarse, la operaron en tres ocasiones y en cada una de estas intervenciones el cáncer persistía.
De hecho, según cuenta ella misma en una entrevista concedida a Canal Extremadura Radio, “al hacerme las operaciones se me hacía un orificio cada vez mayor en el paladar porque me operaban por ahí”.
En el año 2007, la destinaron a Madrid, donde siguió su tratamiento con un nuevo médico. “Me hizo una biopsia y me dijo que ya no tenía cáncer y que el agujero del paladar se había cerrado, y cito textualmente al médico, ‘de manera espontánea’”.
Posteriormente se abrió una comisión en el Arzobispado de Madrid para investigar su curación. “Se formó un tribunal de médicos y teólogos. Lo estudiaron durante 4 años y testificamos todas las personas que tuvimos parte y que me habían visto sufrir, como los médicos, enfermeras, personas cercanas…”, explica.
Los miembros del tribunal también preguntaron a la religiosa si había rezado mucho y a quién para curarse.
Según explica, la hermana Celina se siente “curada por la oración de toda la comunidad porque desde que me dijeron que tenía cáncer la congregación, los alumnos y todas las personas conocidas rezaron por mí porque nos propusimos continuar con el proceso de beatificación del Padre fundador”.
Una vez que en la Archidiócesis de Madrid se ratificó que esa curación era inexplicable para la ciencia, su caso pasó al Vaticano donde también lo examinó otro tribunal de 7 teólogos y doctores que “concluyeron que no había explicación clínica ni científica posible”.
El pasado 14 de enero de 2016, el Papa Francisco concedió la beatificación al P. Ormières.
En el proceso de beatificación es necesario que el candidato interceda ante Dios para lograr un milagro y, en este caso según explica la religiosa: “Este milagro se realizó en mi”.
“Al curarme me pregunté ‘¿por qué a mí?’ Pero sobre todo ‘¿para qué a mí?’ Creo que mi vida ha de responder a ese milagro viviendo día a día con una respuesta a Dios más exigente y llena, comprometida, eso es lo fuerte del milagro para mi”, expresa.