lunes, 4 de abril de 2016

SANTOS Y BEATOS PROCLAMADOS DURANTE EL PONTIFICADO DEL PAPA FRANCISCO


Santos y Beatos proclamados durante el pontificado del Papa Francisco
Te presentamos la lista y biografías de los Santos y Beatos proclamados durante el pontificado del Papa Francisco


Fuente: Catholic.net 



Artículo publicado originalmente el 15 de febrero de 2015
Última actualización el 4 de marzo de 2016

El Papa Francisco ha sido el  papa que ha proclamado más santos en toda la historia, al momento ha inscrito 838 nuevos santos en el canon, pero hay que tomar en cuenta que 813 de ellos son los mártires de Otranto. 
Este número seguirá creciendo ya que el 5 de junio ell Santo Padre proclamará cinco nuevos santos, y además hay dos causas de canonización ya aprobadas que están a la espera de que se señale la fecha en que se celebrará su respectiva ceremonia.
El número de beatos proclamados durante su pontificado es de 738, y durante este año hay varias ceremonias de beatificación ya anunciadas.
La iglesia nos presenta a todos ellos como modelos de fielesque a través de sus obras de generosa dedicación a Dios y a los hermanos, han servido, cada uno desde su propio ámbito, al reino de Dios y se han convertido en herederos. Cada uno de ellos ha respondido con extraordinaria creatividad al mandamiento del amor a Dios y al prójimo.


Te presentamos la lista completa de los Santos y Beatos proclamados durante el pontificado del Papa Francisco  y sus biografías. Conócelos.
Santos (la fecha entre paréntesis es la de la ceremonia de canonización)
Año 2013
Año 2014
Año 2015
Año 2016
Próximas canonizaciones
Beatos (entre paréntesis la fecha de beatificación)

Año 2013
Año 2014
Año 2015
Año 2016
    Próximas beatificaciones:

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    LOS SANTOS DE HOY: LUNES 4 DE ABRIL DEL 2016

    Ambrosio de Milán, SantoAmbrosio de Milán, Santo
    Obispo y Doctor de la Iglesia, 4 de abril
    Pedro Roca Toscas, BeatoPedro Roca Toscas, Beato
    Religioso y Mártir, 4 de abril
    Pedro Ruiz Ortega, BeatoPedro Ruiz Ortega, Beato
    Religioso y Mártir, 4 de abril
    Agatópodo y Teódulo, SantosAgatópodo y Teódulo, Santos
    Mártires, 4 de abril
    Cayetano Catanoso, SantoCayetano Catanoso, Santo
    Presbítero y Fundador, 4 de abril
    Francisco Marto, BeatoFrancisco Marto, Beato
    Vidente de Fátima, 4 de abril
    Guillermo de Noto, BeatoGuillermo de Noto, Beato
    Eremita y Terciario Franciscano, 4 de abril
    Platón, SantoPlatón, Santo
    Abad, 4 de abril
    Benito de Palermo, SantoBenito de Palermo, Santo
    Religioso Franciscano, 4 de abril
    Isidoro de Sevilla, SantoIsidoro de Sevilla, Santo
    Obispo y Doctor de la Iglesia, 4 de abril

    IMÁGENES DE LA ANUNCIACIÓN DEL ÁNGEL A LA VIRGEN MARÍA
















    EL EVANGELIO DE HOY: LUNES 4 DE ABRIL 2016 - SOLEMNIDAD DE LA ANUNCIACIÓN A MARÍA


    Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo
    Solemnidades y fiestas



    Lucas 1, 26-38. Solemnidad de la Anunciación. La voluntad de María coincide con la voluntad del Hijo en el único proyecto de amor del Padre. 


    Por: Andrés Pérez | Fuente: Catholic.net 



    Debido a que la Solemnidad de la Anunciación del Señor coincidió este año con el Viernes Santo, el día de hoy en algunos paises se celebra el Evangelio de esta solemnidad

    Del santo Evangelio según san Lucas 1, 26-38 
    Al sexto mes fue enviado por Dios el ángel Gabriel a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. Y entrando, le dijo: Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo. Ella se conturbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo. El ángel le dijo: No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. Él será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin. María respondió al ángel: ¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón? El ángel le respondió: El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios. Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez, y este es ya el sexto mes de aquella que llamaban estéril, porque ninguna cosa es imposible para Dios. Dijo María: He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra. Y el ángel dejándola se fue. 

    Oración introductoria
    Oh María, qué gran regalo nos ha hecho Jesús desde su cruz: en Ti tenemos una verdadera Madre que nos acompaña en este peregrinar por el mundo y guía nuestros pasos hasta el cielo. Por eso celebramos con júbilo la Pascua y, en este momento, pido tu intercesión para que esta oración aumente mi fe y sepa decir siempre «sí» al Señor.

    Petición
    Señor, dame tu gracia para que se haga tu voluntad en mi vida con la perfección, delicadeza y amor de María.

    Meditación del Papa Francisco
    Hoy nos encontramos ante una de esas maravillas del Señor: ¡María! Una criatura humilde y débil como nosotros, elegida para ser Madre de Dios, Madre de su Creador.


    Miremos a María: después de la Anunciación, lo primero que hace es un gesto de caridad hacia su anciana pariente Isabel; y las primeras palabras que pronuncia son: “Proclama mi alma la grandeza del Señor”, o sea, un cántico de alabanza y de acción de gracias a Dios no sólo por lo que ha hecho en Ella, sino por lo que ha hecho en toda la historia de salvación. Todo es don suyo. Si nosotros podemos entender que todo es don de Dios, ¡cuánta felicidad hay en nuestro corazón! Todo es don suyo ¡Él es nuestra fuerza! (Homilía dle Papa Francisco)
    La Palabra de Dios nos habla en lo más profundo de nuestro corazón. Dios nos dice hoy que le pertenecemos. Él nos hizo, somos su familia, y Él siempre estará presente para nosotros. "No temas", nos dice: "Yo los he elegido y les prometo darles mi bendición".(Homilía de S.S. Francisco, 26 de noviembre de 2015).
    Reflexión
    Ante esta escena uno no sabría qué pensar, ¿cuál de los dos personajes se habrá maravillado más? Penetremos atrevidamente en los pensamientos del arcángel Gabriel para comprender desde otro punto de vista la enorme gracia concedida a la humanidad entera en este grandioso momento.

    En efecto, estamos situados, -y es preciso decirlo despacio y como midiendo cada palabra -, en la plenitud de los tiempos. Parece que toda la creación dependía de este punto culminante. Y así es, sin ninguna exageración. En ese momento se encarna Dios Hombre en las entrañas de María. Y ante este misterio, ¿qué puede hacerse sino contemplar con nuestro corazón y sin palabras este misterio?

    El arcángel, debía comunicar el sublime mensaje de la Encarnación del Verbo. Quizás habrá dicho: Voy a encontrar otra creatura de Dios, quiera o no, esclava del pecado de Adán y Eva. Era lógico. Todos los hombres nacían pecadores, nacían con el pecado original. Nada de común habría de encontrar en ella, salvo que habría de ser afortunadísima. Y hasta podríamos pensar que no conocía a fondo, con ser ángel, el misterio que comunicaría.

    Y he aquí que cuando llega ante ella, ¡magnífico prodigio de la Mano Providente de Dios! Ni en el cielo había criatura tan brillante, tan pura, tan sublime como esa dulce mujer sencilla de pueblo. ¿Ella? Sí, Ella sería la Madre del Verbo. Qué bien ha hecho Dios todose habrá dicho para sí, estremecido de su hermosura y pureza. Era la mejor Madre.

    Probemos un poco también nosotros de este sobrecogimiento, de este estremecimiento ante el misterio, de verla tan pura y bendita, Ella, Nuestra Madre; y que sea Ella quien nos enseñe a amar a su Hijo, como la mejor de las madres.

    Diálogo con Cristo
    Señor, conocer lo que quieres y seguir tu voluntad es la alegría y el camino para dar plenitud a mi vida. Como María, no debo apegarme ciegamente a las propias ideas, sino que debo abrir el corazón para saber escucharte. Por el amor a tu santísima Madre, te suplico la gracia para serte fiel y perseverar en el cumplimiento de tu voluntad hasta el día de mi muerte.

    Propósito
    Rezar un rosario pidiendo a María su intercesión para crecer en mi fe y mi esperanza, a fin de aceptar con docilidad la voluntad de Dios.


    La Anunciación del Ángel a la Virgen Máría. Fiesta de Jesús que se encarnó y fiesta de la Virgen, que fue la que dijo "Hágase en mí según tu palabra"

    SAN BENITO DE PALERMO, RELIGIOSOS FRANCISCANO, 4 DE ABRIL


    Benito de Palermo, Santo
    Religioso Franciscano, 4 de abril


    Por: Ferrini-Ramírez | Fuente: Franciscanos.org 




    Religioso

    Martirologio Romano: En Palermo, ciudad también de Sicilia, san Benito Massarari, denominado «el Moro» por el color de su piel, fue primero eremita, y entró después en la Orden de los Hermanos Menores. Se mostró siempre humilde en todo y lleno de fe en la divina Providencia. 

    Fecha de canonización: 24 de mayo de 1807 por el Papa Pío VII.

    A este San Benito se le llama de Palermo, por la ciudad en que murió, o de San Fratello o San Filadelfo por el lugar en que nació, o también el Moro o el Negro por el color de su piel y su ascendencia africana. De joven abrazó la vida eremítica, pero más tarde pasó a la Orden franciscana. No tenía estudios, pero sus dotes naturales y espirituales de consejo y prudencia atraían a multitud de gente. Aunque hermano lego, fue, no sólo cocinero, sino también guardián de su convento y maestro de novicios.

    San Benito el Moro nació en 1526 en San Fratello, antes llamado San Filadelfo, provincia de Mesina (Sicilia), de padres cristianos, Cristóbal Manassari y Diana Larcari, descendientes de esclavos negros. De adolescente Benito cuidaba el rebaño del patrón y desde entonces, por sus virtudes, fue llamado el «santo moro». 

    A los veintiún años entró en una comunidad de ermitaños, fundada en su región natal por Jerónimo Lanza, que vivía bajo la Regla de San Francisco. Cuando los ermitaños se trasladaron al Monte Pellegrino para vivir en mayor soledad, Benito los siguió, y a la muerte de Lanza, fue elegido superior por sus compañeros.

    En 1562 Pío IV retiró la aprobación que Julio II había dado a aquel instituto e invitó a los religiosos a entrar en una Orden que ellos mismos escogieran. Benito escogió la Orden de los Hermanos Menores, y entró en el convento de Santa María de Jesús, en Palermo, fundado por el Beato Mateo de Agrigento. 

    Luego fue enviado al convento de Santa Ana Giuliana, donde permaneció sólo tres años. Trasladado nuevamente a Palermo, vivió allí veinticuatro años. 

    Al principio ejerció el oficio de cocinero con gran espíritu de sacrificio y de caridad sobrenatural. Se le atribuyeron muchos milagros.

    Se le tenía en tal aprecio que en 1578, siendo religioso no sacerdote, fue nombrado superior del convento. Por tres años guió a su comunidad con sabiduría, prudencia y gran caridad. Con ocasión del Capítulo provincial se trasladó a Agrigento, donde, por la fama de su santidad, que se había difundido rápidamente, fue acogido con calurosas manifestaciones del pueblo.

    Nombrado maestro de novicios, atendió a este delicado oficio de la formación de los jóvenes con tanta santidad, que se creyó que tenía el don de escrutar los corazones. Finalmente volvió a su primitivo oficio de cocinero. 

    Un gran número de devotos iba a él a consultarlo, entre los cuales también sacerdotes y teólogos, y finalmente el Virrey de Sicilia. Para todos tenía una palabra sabia, iluminadora, que animaba siempre al bien. Humilde y devoto, redoblaba las penitencias, ayunando y flagelándose hasta derramar sangre. Realizó numerosas curaciones. Cuando salía del convento la gente lo rodeaba para besarle la mano, tocarle el hábito, encomendarse a sus oraciones. Dócil instrumento de la bondad divina, hacía inmenso bien a favor de las almas.

    En 1589 enfermó gravemente y por revelación conoció el día y hora de su muerte. Recibió los últimos sacramentos, y el 4 de abril de 1589 expiró dulcemente a la edad de 63 años, pronunciando las palabras de Jesús moribundo: «En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu». Su culto se difundió ampliamente y vino a ser el protector de los pueblos negros. 
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