jueves, 2 de febrero de 2017

SANTORAL DE HOY JUEVES 2 DE FEBRERO DEL 2016

Tshimangadzo Samuel Benedict Daswa, BeatoTshimangadzo Samuel Benedict Daswa, Beato
Mártir Laico, 2 de febrero
Catalina de Ricci, SantaCatalina de Ricci, Santa
Virgen, 2 de febrero
Luis Brisson, BeatoLuis Brisson, Beato
Sacerdote y Fundador, 2 de febrero
Burcardo de Würzburg, SantoBurcardo de Würzburg, Santo
Obispo, 2 de febrero
Nicolás Saggio de Longobardi, SantoNicolás Saggio de Longobardi, Santo
Religioso, 2 de febrero
Juan Teófano Vénard, SantoJuan Teófano Vénard, Santo
Presbítero y Mártir, 2 de febrero
Lorenzo de Canterbury, SantoLorenzo de Canterbury, Santo
Obispo, 2 de febrero
Simón Fidati de Cassia, BeatoSimón Fidati de Cassia, Beato
Presbítero, 2 de febrero
Esteban Bellesini, BeatoEsteban Bellesini, Beato
Presbítero Agustino, 2 de febrero
María Catalina Kasper, BeataMaría Catalina Kasper, Beata
Virgen y Fundadora, 2 de febrero
Andrés Carlos Ferrari, BeatoAndrés Carlos Ferrari, Beato
Obispo, 2 de febrero
María Dominica Mantovani, BeataMaría Dominica Mantovani, Beata
Fundadora, 2 de febrero
Juana de Lestonnac, SantaJuana de Lestonnac, Santa
Fundadora, 2 de febrero
Fiesta de la Presentación del SeñorFiesta de la Presentación del Señor
Fiesta litúrgica, 2 de febrero

LECTURAS BÍBLICAS DE LA FIESTA DE LA PRESENTACIÓN DEL SEÑOR, 2 DE FEBRERO


Primera lectura
Lectura del libro de Malaquías (3,1-4):

Así dice el Señor: «Mirad, yo envío a mi mensajero, para que prepare el camino ante mí. De pronto entrará en el santuario el Señor a quien vosotros buscáis, el mensajero de la alianza que vosotros deseáis. Miradlo entrar –dice el Señor de los ejércitos–. ¿Quién podrá resistir el día de su venida?, ¿quién quedará en pie cuando aparezca? Será un fuego de fundidor, una lejía de lavandero: se sentará como un fundidor que refina la plata, como a plata y a oro refinará a los hijos de Leví, y presentarán al Señor la ofrenda como es debido. Entonces agradará al Señor la ofrenda de Judá y de Jerusalén, como en los días pasados, como en los años antiguos.»

Palabra de Dios

*****************************

Salmo - Sal 23

R/. El Señor, Dios de los ejércitos, es el Rey de la gloria.

¡Portones!, alzad los dinteles, 
que se alcen las antiguas compuertas: 
va a entrar el Rey de la gloria. R/.

¿Quién es ese Rey de la gloria? 
El Señor, héroe valeroso; 
el Señor, héroe de la guerra. R/.

¡Portones!, alzad los dinteles, 
que se alcen las antiguas compuertas: 
va a entrar el Rey de la gloria. R/.

¿Quién es ese Rey de la gloria?
El Señor, Dios de los ejércitos.
Él es el Rey de la gloria. R/.


*************************

Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (2,14-18):

Los hijos de una familia son todos de la misma carne y sangre, y de nuestra carne y sangre participó también Jesús; así, muriendo, aniquiló al que tenía el poder de la muerte, es decir, al diablo, y liberó a todos los que por miedo a la muerte pasaban la vida entera como esclavos. Notad que tiende una mano a los hijos de Abrahán, no a los ángeles. Por eso tenía que parecerse en todo a sus hermanos, para ser sumo sacerdote compasivo y fiel en lo que a Dios se refiere, y expiar así los pecados del pueblo. Como él ha pasado por la prueba del dolor, puede auxiliar a los que ahora pasan por ella.

Palabra de Dios

*****************************

Lectura del santo evangelio
 según san Lucas (2,22-40):


Cuando llegó el tiempo de la purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: «Todo primogénito varón será consagrado al Señor», y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: «un par de tórtolas o dos pichones.» Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Espíritu Santo moraba en él. Había recibido un oráculo del Espíritu Santo: que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo. 

Cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo previsto por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: «Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel.»

Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. 

Simeón los bendijo, diciendo a María, su madre: «Mira, éste está puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; será como una bandera discutida: así quedará clara la actitud de muchos corazones. Y a ti, una espada te traspasará el alma.»

Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Era una mujer muy anciana; de jovencita había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo día y noche, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones. Acercándose en aquel momento, daba gracias a Dios y hablaba del niño a todos los que aguardaban la liberación de Jerusalén. Y, cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño iba creciendo y robusteciéndose, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba. 

Palabra del Señor

IMÁGENES DE LA FIESTA DEL PRESENTACIÓN DEL SEÑOR
















miércoles, 1 de febrero de 2017

IMÁGENES DE SAN JOSÉ





EL EVANGELIO DE HOY MIÉRCOLES 1 DE FEBRERO DEL 2017


Con mirada y corazón de niño
Marcos 6, 1-6. IV Miércoles de Tiempo Ordinario. Ciclo A.


Por: H. Balam Loza, LC | Fuente: www.missionkits.org 



En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Señor, quiero conocerte, quiero ser tu amigo y estar aquí sin preocuparme por nada más que por estar contigo. Hoy no te quiero pedir milagros brillantes sólo te pido que me des fe para descubrirte en el mayor milagro que es la Eucaristía. Enséñame a verte en el pan; a descubrir que en ese pequeño trozo de pan está el mismo Dios; a encontrar en el silencio del sagrario las palabras que mi corazón necesita.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)


Del santo Evangelio según san Marcos 6, 1-6
En aquel tiempo, Jesús fue a su tierra en compañía de sus discípulos. Cuando llegó el sábado, se puso a enseñar en la sinagoga, y la multitud que lo escuchaba se preguntaba con asombro: “Dónde aprendió este hombre tantas cosas? ¿De dónde le viene esa sabiduría y ese poder para hacer milagros? ¿Qué no es éste el carpintero, el hijo de María, el hermano de Santiago, José, Judas y Simón? ¿No viven aquí, entre nosotros, sus hermanas?” Y estaban desconcertados.
Pero Jesús les dijo: “Todos honran a un profeta, menos los de su tierra, sus parientes y los de su casa”. Y no pudo hacer allí ningún milagro, sólo curó a algunos enfermos imponiéndoles las manos. Y estaba extrañado de la incredulidad de aquella gente. Luego se fue a enseñar en los pueblos vecinos.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
A veces es necesario tener ojos de niños para descubrir en las cosas más sencillas algo grande. ¡Cuántas veces uno puede perderse la alegría de la vida por sus prejuicios! Pensemos en un niño, no tiene problema en pasarse un buen día jugando con un niño de la calle, no tiene miedo a hacer preguntas incómodas, no tiene vergüenza. En fin, un niño sabe ver en un trozo de pan al mismo Dios, sabe orar con Jesús como con un amigo y no tiene miedo de decir a sus amigos que su mejor amigo es Jesús.
Y lo que pasa en el Evangelio de hoy es lo contrario de lo que nos enseñan los niños. Los nazarenos ven a Jesús en carne y hueso, escuchan sus grandes palabras y se dan cuenta de sus milagros. Y, ¿qué es lo que pasa? Nada. Absolutamente nada. Su corazón queda más frío que una piedra porque lo ven todo con miradas humanas. Ven la situación en un plano horizontal. Entonces comienzan con los comentarios típicos de personas envidiosas, ¿pero éste no es así o asá? ¡Hombre, pero si conocemos bien a éste y no nos va a sorprender! No saben ver con los ojos de los niños que ven más allá.
Y tal vez nos puede pasar lo mismo a nosotros. Tal vez vamos a misa con ojos humanos y no descubrimos el gran milagro. Vemos en el sacerdote a un hombre, que tiene tal y cual defecto pero no nos maravillamos que Dios esté en ese hombre tan frágil; no nos maravillamos de la vocación sacerdotal y por eso se escuchan tantas críticas contra el «cura». Puede pasar que no escuchemos con fervor las palabras del Evangelio porque estamos acostumbrados y poco a poco vamos cerrando el corazón. En fin, puede pasar que no veamos el gran regalo de la Eucaristía y comulguemos como si tomásemos cualquier cosa, sin darnos cuenta que es Dios que viene a nuestros corazones.
Jesús, renueva nuestro corazón para que te descubramos en todos los acontecimientos de nuestra vida, para que sepamos ver tu mano amorosa en nuestra historia y nos maravillemos de cada día. Que podamos ver en el prójimo las grandes cualidades que tienen y no los veamos esperando a ver dónde fallan. Finalmente te pido que aprendamos a ver en los sacramentos un momento especial donde Tú vienes a nosotros y nos llenas de tu amor y de tu misericordia.
«Antes de nada reconocer a Jesús, conocer y reconocerle. En su tiempo, el apóstol Juan, al inicio de su Evangelio, dice que muchos no le reconocieron: los doctores de la ley, los sumos sacerdotes, los escribas, los saduceos, algunos fariseos. Es más, le persiguieron, le mataron. La primera actitud que hay que tener es conocer y reconocer a Jesús; buscar cómo era Jesús: ¿a mí me interesa esto? Una pregunta que todos nosotros debemos hacernos: ¿a mí me interesa conocer a Jesús o quizás interesa más la telenovela o las charlas o las ambiciones o conocer la vida de los demás? Se debe conocer a Jesús para poderle reconocer. Y para conocer a Jesús está la oración, el Espíritu Santo, sí; pero un buen sistema es tomar el Evangelio todos los días.»
(Cf Homilía de S.S. Francisco, 9 de enero de 2017, en santa Marta).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Hoy, Jesús, voy a pasar un momento a la Eucaristía para contemplar con una nueva mirada y un nuevo corazón este gran milagro.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

ORACIÓN A SANTA BRÍGIDA DE KILDARE


Oración a Santa Brígida de Kildare

Señor, te pedimos que como santa Brígida de Kildare
aprendamos a despreciar las cosas tales como la vanidad
y las riquezas para poder servirte con un corazón
generoso e indiviso y alcanzar, como ella,
el premio de la eterna bienaventuranza.

Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

SANTA BRIGIDA DE KILDARE, 1 DE FEBRERO, PATRONA DE IRLANDA


Hoy 1 de febrero es la fiesta de Santa Brígida de Kildare, 
patrona de Irlanda



 (ACI).- Santa Brígida de Kildara fue monja, abadesa y uno de los santos más grandes en Irlanda, declarada patrona del país junto a San Patricio y San Columbano.

Vivió probablemente entre los años 450 y 525. Nació en la ciudad de Faughart al norte de Irlanda, y según la tradición, desde temprana edad se consagró a Dios y recibió el velo de las vírgenes de mano de San Melo, sobrino de San Patricio.

Después de ello, Brígida, junto con otras vírgenes consagradas, permaneció en la ciudad de Meatr y obró muchos milagros. Curó a un extranjero por nombre Marcos, a dos leprosos, dos mudos y dos ciegos; proporcionó cerveza de un solo barril a dieciocho iglesias, entre otros.

También fundó un convento en la ciudad de Kildare (Irlanda) adoptando la regla de San Cesáreo hacia el año 513. Esta regla fue retomada por varios conventos de Irlanda.

Santa Brígida es Venerada como madre espiritual por muchísimas religiosas. En vida ya era considerada santa.

Falleció en Kildare y fue enterrada en Downpatrick junto a San Patricio y San Columba.

SANTORAL DE HOY MIÉRCOLES 1 DE FEBRERO DEL 2016

Mártires de Angers, BeatosMártires de Angers, Beatos
Mártires, 1 de febrero
Severo de Ravena, SantoSevero de Ravena, Santo
Obispo, 1 de febrero
Trifón de Frigia, SantoTrifón de Frigia, Santo
Mártir, 1 de febrero
Enrique Morse, SantoEnrique Morse, Santo
Presbítero y Mártir, 1 de febrero
Juana Francisca (Ana) Michelotti, BeataJuana Francisca (Ana) Michelotti, Beata
Fundadora, 1 de febrero
Luis Variara, BeatoLuis Variara, Beato
Presbítero Salesiano, 1 de febrero
Cecilio, SantoCecilio, Santo
Primer Obispo de Granada, 1 de febrero
Reginaldo de Orleans, BeatoReginaldo de Orleans, Beato
Presbítero Dominico, 1 de febrero
Andrés Segni, BeatoAndrés Segni, Beato
Presbítero, 1 de febrero
Viridiana SantaViridiana Santa
Virgen, 1 de febrero
Raimundo de Fitero, SantoRaimundo de Fitero, Santo
Abad y Fundador, 1 de febrero
Brígida de Kildare, SantaBrígida de Kildare, Santa
Abadesa, 1 de febrero
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...