Páginas
- Página principal
- San Juan Bosco
- San Valentín
- San Ignacio de Loyola
- San Juan XXIII, el Papa Bueno
- San Antonio Abad
- San Martín de Porres
- Santa Mónica
- Santo Domingo de Savio
- Santa Margarita de Alacoque
- Quiénes son los Santos?
- EL Santo Rosario
- Virgen de Guadalupe
- Virgen y Santos para Colorear
- Florecillas a María: Mes de Mayo
- La Divina Misericordia
- Junio: Nardos al Sagrado Corazón de Jesús
- Imágenes de la Virgen María
- Oraciones a la Virgen María
- Oraciones a Santos y Beatos
- Oraciones por las Vocaciones Sacerdotales y Religi...
- Oblatos de San José
- San Carlos Borromeo
- Santa Faustina Kowalska
- San Felipe de Neri
- Santa Rita de Casia
- San Luis Gonzaga
- San Josemaría Escrivá de Balaguer
- San Pedro y San Pablo
- San Pío de Pietrelcina
- Santa Teresita del Niño Jesús
- San Francisco de Asís
- Santa Teresa de Jesús (Ávila)
- San Judas Tadeo
- San Maximiliano Kolbe
- Los Apóstoles de Jesús
- Santa Gema Galgani
- Santa Teresa de Calcuta
- San Antonio de Padua
- San José Marello
- Santa Rosa de Lima
- San Vicente de Paúl
- San Pío de Pietrelcina
- San Juan Pablo II
- San Juan Bautista
- Semana Santa - Imágenes
- San Patricio
- Adviento 2024
- La Corona de Adviento
- Navidad 2024 - Novena y Meditaciones
- Tarjetas de Feliz Navidad y Merry Christmas
- NAVIDAD - PESEBRES NAVIDEÑOS
Mostrando entradas con la etiqueta Beata Teresa de Calcuta. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Beata Teresa de Calcuta. Mostrar todas las entradas
lunes, 7 de septiembre de 2020
domingo, 6 de septiembre de 2020
ORACIÓN PARA PEDIR LA INTERCESIÓN DE SANTA TERESA DE CALCUTA
Oración para pedir la intercesión de Santa Teresa de Calcuta
Santa Teresa de Calcuta,
Tú permitiste al sediento amor de Jesús en la Cruz
convertirse en una llama viva dentro de ti.
Llegaste a ser luz de su amor para todos.
Obtenme del corazón de Jesús...
(pronuncia en este momento tu pedido)
Enséñame a dejar que Jesús entre y posea todo mi ser,
tan completamente, que mi vida
también pueda irradiar su luz y amor hacia los demás.
Amén.
martes, 5 de abril de 2016
viernes, 18 de marzo de 2016
sábado, 5 de septiembre de 2015
BEATA TERESA DE CALCUTA, FUNDADORA, 5 DE SEPTIEMBRE
Teresa de Calcuta, Beata
Fundadora, 5 de septiembre
Por: Judith Corsino | Fuente: judithcorsino.com
Teresa (Inés) Gonhxa Bojaxhiu
Fundadora
Martirologio Romano: En la ciudad de Calcuta, en la India, beata Teresa (Inés) Gonhxa Bojaxhiu, virgen, que, nacida en Albania, trató de apagar la sed de Cristo clavado en la cruz atendiendo con eximia caridad a los hermanos más pobres, y fundó las congregaciones de Misioneros y Misioneras de la Caridad, para servir a los enfermos y abandonados (1997).
La Madre Teresa fue albanesa de nacimiento y su nombre original es Agnes Gonxha Bojaxhiu. En el año 1948 la Madre Teresa adquirió la ciudadanía hindú. A los 18 años de edad, la Madre Teresa ingresó a la Orden de las Hermanas de Nuestra Señora de Loreto en Irlanda. Recibió su formación religiosa en Dublín, Irlanda y en Dardjiling, India.
En el año 1931, la Madre Teresa tomó el nombre de Teresa en honor a una monja francesa, Thérèse Martin quien fue canonizada en 1927 con el título de Santa Thérèse de Lisieux. En el año 1937 la Madre Teresa tomó los votos religiosos y enseñó por 20 años en el Colegio Santa María en Calcuta, India y en el año 1946, precisamente el 10 de setiembre, recibió otro llamado de Dios, el servicio hacia los más pobres. En el año 1948, el Papa Pio XII le concedió a la Madre Teresa permiso para dejar sus funciones como monja independiente y empezó a compartir su vida en las calles de Calcuta con los más pobres, los enfermos y los hambrientos.
La Madre Teresa fundó una congregación llamada las Misioneras de la Caridad. Su trabajo inicial fue el de enseñar a leer a los niños pobres de la calle. En el año 1950, la Madre Teresa empezó a ayudar a las personas enfermas de lepra. En el año 1965, el Papa Pablo VI colocó a la congregación de las Misioneras de la Caridad bajo el control del Papado y autorizó a la Madre Teresa a expandir la Orden religiosa en otros países. Alrededor de todo el mundo se abrieron centros para atender leprosos, ancianos, ciegos y personas que padecen del SIDA y se fundaron escuelas y orfanatos para los pobres y niños abandonados.
La Madre Teresa merece un lugar especial en esta red gigantesca de comunicación porque su obra es un mensaje de amor. Su trabajo demuestra que una convicción verdadera siempre está acompañada por una acción, que el amor en acción es servicio. Ganó el Premio Nobel de la Paz en el año 1979 contra su voluntad pero que agradeció en nombre de los más pobres entre los pobres.
Beatificación: 19 Octubre, 2003
jueves, 4 de septiembre de 2014
BEATA TERESA DE CALCUTA, FUNDADORA, 5 DE SEPTIEMBRE
Autor: Judith Corsino | Fuente: judithcorsino.com
Teresa de Calcuta, Beata
Fundadora, 5 de septiembre
Teresa (Inés) Gonhxa Bojaxhiu
Martirologio Romano: En la ciudad de Calcuta, en la India, beata Teresa (Inés) Gonhxa Bojaxhiu, virgen, que, nacida en Albania, trató de apagar la sed de Cristo clavado en la cruz atendiendo con eximia caridad a los hermanos más pobres, y fundó las congregaciones de Misioneros y Misioneras de la Caridad, para servir a los enfermos y abandonados (1997).
La Madre Teresa fue albanesa de nacimiento y su nombre original es Agnes Gonxha Bojaxhiu. En el año 1948 la Madre Teresa adquirió la ciudadanía hindú. A los 18 años de edad, la Madre Teresa ingresó a la Orden de las Hermanas de Nuestra Señora de Loreto en Irlanda. Recibió su formación religiosa en Dublín, Irlanda y en Dardjiling, India.
En el año 1931, la Madre Teresa tomó el nombre de Teresa en honor a una monja francesa, Thérèse Martin quien fue canonizada en 1927 con el título de Santa Thérèse de Lisieux. En el año 1937 la Madre Teresa tomó los votos religiosos y enseñó por 20 años en el Colegio Santa María en Calcuta, India y en el año 1946, precisamente el 10 de setiembre, recibió otro llamado de Dios, el servicio hacia los más pobres. En el año 1948, el Papa Pio XII le concedió a la Madre Teresa permiso para dejar sus funciones como monja independiente y empezó a compartir su vida en las calles de Calcuta con los más pobres, los enfermos y los hambrientos.
La Madre Teresa fundó una congregación llamada las Misioneras de la Caridad. Su trabajo inicial fue el de enseñar a leer a los niños pobres de la calle. En el año 1950, la Madre Teresa empezó a ayudar a las personas enfermas de lepra. En el año 1965, el Papa Pablo VI colocó a la congregación de las Misioneras de la Caridad bajo el control del Papado y autorizó a la Madre Teresa a expandir la Orden religiosa en otros países. Alrededor de todo el mundo se abrieron centros para atender leprosos, ancianos, ciegos y personas que padecen del SIDA y se fundaron escuelas y orfanatos para los pobres y niños abandonados.
La Madre Teresa merece un lugar especial en esta red gigantesca de comunicación porque su obra es un mensaje de amor. Su trabajo demuestra que una convicción verdadera siempre está acompañada por una acción, que el amor en acción es servicio. Ganó el Premio Nobel de la Paz en el año 1979 contra su voluntad pero que agradeció en nombre de los más pobres entre los pobres.
Beatificación: 19 Octubre, 2003
viernes, 2 de mayo de 2014
miércoles, 5 de febrero de 2014
VEINTE AÑOS DE UNAS HISTÓRICAS PALABRAS DE MADRE TERESA DE CALCUTA
Autor: Almudi.org | Fuente: almudi.org Veinte años de unas históricas palabras de Madre Teresa | |||
Se cumplirán dos décadas de la histórica intervención de la Madre Teresa de Calcuta en el Desayuno de Oración Nacional que tradicionalmente se celebra cada año en Washington, DC. Fue el 3 de febrero de 1994 | |||
|
jueves, 5 de diciembre de 2013
LA MADRE TERESA Y LA EUCARISTÍA
La Madre Teresa y la Eucaristía
La Madre Teresa es una santa profundamente eucarística. La Eucaristía era el corazón de su vida, de su espiritualidad. Decía a las religiosas: «Jesús en la Eucaristía y Jesús en los pobres, bajo las especies del pan y bajo las especies del pobre, eso es lo que hace de nosotras contemplativas en el corazón del mundo». En la base de la espiritualidad de la Madre Teresa estaba el sagrario. Y no es por casualidad que se llama «sagrarios» a las comunidades abiertas en todo el mundo por las misioneras de la Caridad, porque son las casas de Jesús, decía la Madre Teresa. Las religiosas comulgan todos los días y todos los días hacen una hora de adoración eucarística, que ocupa un lugar muy importante en la vida espiritual de las misioneras de la Caridad.
Ella misma relata: “Recién en 1973, cuando empezamos nuestra Hora Santa diaria, fue que nuestra comunidad comenzó a crecer y florecer . . . En nuestra congregación solíamos tener adoración una vez a la semana durante una hora; luego en 1973 decidimos dedicar una hora diaria a la adoración. El trabajo que nos espera es enorme. Los hogares que tenemos para los indigentes enfermos y moribundos están totalmente llenos en todas partes. Pero desde el momento que empezamos a tener una hora de adoración cada día, el amor a Jesús se hizo más íntimo en nuestro corazón, el cariño entre nosotras fue más comprensivo y el amor a los pobres se nos llenó de compasión, y así se nos ha duplicado el número de vocaciones. La hora que dedicamos ante Jesús en la Eucaristía es la parte más valiosa de todo el día, es lo que cambia nuestros corazones.
Nuestras vidas deben estar entrelazadas con la Eucaristía. El Cristo que se nos ofrece bajo las apariencias de pan, y el Cristo que se oculta bajo las semblanzas doloridas del pobre es el mismo Jesús. Por eso, nosotras no somos simples asistentes sociales. Un cristiano, si cree que está alimentando a Cristo hambriento, que está vistiendo a Cristo desnudo, es un contemplativo desde el corazón mismo de su hogar, de su vida, del mundo mismo. Por eso yo defino a nuestras Hermanas y Hermanos Misioneros de la Caridad como contemplativos insertos en el mismo corazón del mundo durante las veinticuatro horas del día. ¡Dar! Ofrecer a quienes viven en nuestro entorno el amor que hemos recibido. Dar hasta sentir daño, porque el amor auténtico hiere. Es por lo que tenemos que amar hasta sentir dolor: a través de nuestro tiempo, de nuestras manos, de nuestros corazones. Tenemos que compartir todo lo que tenemos. Hace tiempo, en Calcuta, teníamos dificultades para conseguir azúcar. Un día un niño pequeño, de nada más que cuatro años, un niño indio, vino con sus padres y me trajo un tarro de azúcar. Me dijo: "Estaré tres días sin comer azúcar. Dé esto a sus niños". Aquel niño pequeño amaba hasta el sacrificio.
La Eucaristía y el pobre no son más que un mismo amor. Para ser capaces de ver, para ser capaces de amar, tenemos necesidad de una profunda unidad con Cristo, de una oración intensa. Por eso las Hermanas empiezan su jornada con la misa, la Santa Comunión, la meditación. Y la cerramos con una hora de adoración al Santísimo. Esta unión eucarística constituye nuestra fuerza, nuestra alegría y nuestro amor. Hay un pequeño detalle: tenemos que unir la oración con el trabajo. Se lo tratamos de inculcar a nuestra Hermanas invitándolas a "convertir el trabajo en oración". ¿Cómo es posible convertir el trabajo en oración? El trabajo no puede sustituir a la oración. De la misma manera, la oración no puede sustituir al trabajo. Sin embargo, tenemos que aprender a convertir el trabajo en oración. ¿Cómo podemos hacer esto? Haciéndolo con Jesús, haciéndolo por Jesús, haciéndolo para Jesús. Ésa es la forma de convertir en oración nuestro trabajo. Es posible que yo pueda seguir con toda la atención. Pero Dios tampoco exige de mí que le dedique toda la atención. En cambio, la intención sí puede ser plena.”
De la homilía de Juan Pablo II con ocasión de la beatificación de la Madre Teresa de Calcuta:
"El Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate de todos" (Mc 10, 45). La madre Teresa compartió la pasión del Crucificado, de modo especial durante largos años de "oscuridad interior". Fue una prueba a veces desgarradora, aceptada como un "don y privilegio" singular.
En las horas más oscuras se aferraba con más tenacidad a la oración ante el santísimo Sacramento. Esa dura prueba espiritual la llevó a identificarse cada vez más con aquellos a quienes servía cada día, experimentando su pena y, a veces, incluso su rechazo. Solía repetir que la mayor pobreza era la de ser indeseados, la de no tener a nadie que te cuide.
"Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti". Cuántas veces, como el salmista, también madre Teresa, en los momentos de desolación interior, repitió a su Señor: "En ti, en ti espero, Dios mío".
Acojamos su mensaje y sigamos su ejemplo.
Virgen María, Reina de todos los santos, ayúdanos a ser mansos y humildes de corazón como esta intrépida mensajera del amor. Ayúdanos a servir, con la alegría y la sonrisa, a toda persona que encontremos. Ayúdanos a ser misioneros de Cristo, nuestra paz y nuestra esperanza. Amén.”
miércoles, 6 de noviembre de 2013
ORACIÓN PARA APRENDER A AMAR
ORACIÓN PARA APRENDER A AMAR
Autor: Madre Teresa de Calcuta
Señor, cuando tenga hambre,
dame alguien que necesite comida;
Cuando tenga sed,
dame alguien que precise agua;
Cuando sienta frío,
dame alguien que necesite calor.
Cuando sufra,
dame alguien que necesita consuelo;
Cuando mi cruz parezca pesada,
déjame compartir la cruz del otro;
Cuando me vea pobre,
pon a mi lado algún necesitado.
Cuando no tenga tiempo,
dame alguien que precise de mis minutos;
Cuando sufra humillación,
dame ocasión para elogiar a alguien;
Cuando esté desanimado,
dame alguien para darle nuevos ánimos.
Cuando quiera que los otros me comprendan,
dame alguien que necesite de mi comprensión;
Cuando sienta necesidad de que cuiden de mí,
dame alguien a quien pueda atender;
Cuando piense en mí mismo,
vuelve mi atención hacia otra persona.
Haznos dignos, Señor,
de servir a nuestros hermanos;
Dales, a través de nuestras manos,
no sólo el pan de cada día,
también nuestro amor misericordioso,
imagen del tuyo.
Amén.
martes, 5 de noviembre de 2013
Suscribirse a:
Entradas (Atom)