Oración a San Lucas para conseguir el amor ansiado
Bien amado San Lucas,
tú que acompañaste a Jesús,
nuestro Maestro y Salvador,
y con la doctrina de tu Palabra,
nos has dado detalles de la humanidad,
bondad, compasión y divinidad de Él,
tú que has estado siempre inspirado
por el divino Espíritu del amor;
tu que demostraste el afecto más puro
por la Santísima Virgen María
y, con devoción, plasmaste en lienzo su bello rostro;
tú que por amor a los más necesitados
como médico sanabas sus cuerpos
y como hombre compasivo sus almas,
enséñame a encontrar la salud de mi alma y corazón.
San Lucas, glorioso evangelista,
santo patrono protector del amor,
tú que siempre estableciste el amor a los demás,
que uniste a tus hermanos en el amor,
te pido que escuches mi plegaria,
y que por tu divina gracia,
consigas que yo viva el amor verdadero,
que me alejes de tentaciones falsas,
de ilusiones mal encaminadas,
y me lleves por el camino del amor bueno y autentico.
San Lucas evangelista bien amado,
haz que por tu santa intervención
mi desesperada suplica sea concedida,
para que consiga la persona que me está destinada,
para que encuentre (o recupere) mi gran amor,
para que pueda estar con mi alma gemela,
ese ser maravilloso que me complemente,
ese ser que sepa dar y recibir amor,
cariño, amistad, lealtad y comprensión,
que esté a mi lado en todo momento y en toda situación.
San Lucas, médico glorioso,
pide al Señor me conceda
lo que por amor, con mucha fe y viva esperanza
solicito en esta oración:
(pedir lo que se quiere conseguir).
San Lucas amoroso,
escucha y remedia nuestros desesperados problemas,
danos tu auxilio y protección
enséñanos a amar al Señor,
a la Santísima Virgen María y a su amado Hijo,
ayúdanos a hacer siempre el bien a nuestros hermanos,
como tú lo hiciste.
Por Jesucristo nuestro Señor.
Amén.
Rezar el Credo y la Salve.
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Oración a San Lucas por la salud
¡Oh Dios, que sanas las enfermedades de tu pueblo,
y que llamaste a Lucas, el médico amado,
para que fuese uno, de tus evangelistas!
Concédenos que
en la saludable doctrina de tu Palabra transmitida por él,
hallen nuestras almas la medicina eficaz
para todas tus dolencias; por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.