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PAPA FRANCISCO: LAS PERSONAS VALEN MÁS QUE LAS COSAS


Papa Francisco: “Las personas valen más que las cosas”
Redacción ACI Prensa
 Foto: Vatican Media




“Las personas valen más que las cosas”, aseveró el Papa Francisco este martes 18 de agosto en un mensaje sobre la administración cristiana de las riquezas.

En el mensaje, publicado en su perfil oficial de la red social Twitter, el Pontífice afirma que “la riqueza puede llevar a construir muros. Jesús, por el contrario, invita a sus discípulos a transformar bienes y riquezas en relaciones, porque las personas valen más que las cosas y cuentan más que las riquezas que se poseen”.


Este mensaje se suma a otros que el Santo Padre difundió en los últimos días sobre la vida cristiana. En una carta a los religiosos y religiosas de Brasil con motivo de la Semana de la Vida Consagrada, que se está celebrando del 16 al 22 de agosto, Francisco recordó que “el camino vocacional tiene su origen en la experiencia de saberse amado por Dios”.


“La propia vida es ya fruto de una llamada de Dios; nos llamó a la vida porque nos ama y lo predispuso todo para que cada uno de nosotros fuese único, acompañándonos a lo largo de los caminos polvorientos de nuestra vida”, afirmó en la carta.

En otra misiva enviada por medio del Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Pietro Parolin, a los participantes en el Encuentro “Meetin per l’amicizia fra i popili” (Encuentro por la amistad entre los pueblos), que se está celebrando en la localidad italiana de Rimini, Francisco puso de relieve un efecto inesperado del confinamiento por la pandemia de coronavirus: el redescubrimiento de la capacidad de asombrarse.

“En los últimos meses hemos experimentado esa dimensión del estupor que asume la forma de la compasión ante el sufrimiento, ante la fragilidad, ante la precariedad de la existencia”.

Asimismo, durante el Ángelus dominical del 16 de agosto, el Papa Francisco invitó a no ocultar las heridas de la historia personal de cada uno, sino asumirlas y ponerlas delante de Dios.

“Cada uno de nosotros tiene su propia historia” por lo que cuestionó: “¿Qué hago yo con mi historia? ¿La escondo?” por lo que sugirió que la “debemos llevar delante al Señor”.

SAN ALBERTO HURTADO, 18 DE AGOSTO


San Alberto Hurtado
18 de agosto


(Alberto Hurtado Cruchaga; Viña del Mar, 1901 - Santiago, 1952) Jurista y sacerdote jesuita chileno, conocido también como el padre Hurtado. Canonizado en 2005 por el papa Benedicto XVI, se le considera una de las figuras religiosas chilenas más relevantes del siglo XX.


San Alberto Hurtado

Alberto Hurtado realizó sus estudios en el colegio jesuita San Ignacio de Santiago de Chile, de donde pasó a la Universidad Católica de la misma ciudad para cursar la carrera de derecho, que concluyó en 1924. Poco después ingresó como novicio en la orden jesuita, en la casa de formación que la orden tenía en la ciudad de Chillán. Tras ello marchó a Argentina, España y Bélgica (Universidad de Lovaina) para completar sus estudios y su formación religiosa. En 1933 fue ordenado sacerdote.

Ya de regreso a Chile, en 1936 comenzó su labor docente en la universidad como doctor en psicología y pedagogía. En 1942 fue nombrado asesor en el área de juventud de la organización Acción Católica, con la que recorrió todo el país fundando centros de asistencia juveniles, sin dejar prácticamente provincia sin visitar. Siguiendo con su obra social y catequística, en el año 1944 fundó el Hogar de Cristo, centro creado con el propósito de dar cobijo a los desamparados. Por su intensa actividad, el padre Hurtado llegaría a ser conocido como "el cura de los pobres".

En 1948, cuando las ideas marxistas amenazaban con extenderse por las capas más desprotegidas y la pujante clase obrera chilena por medio de los sindicatos, Alberto Hurtado creó un sindicato católico, Acción Sindical Chilena (ASICH), con el objeto de oponer resistencia a un ideario político que iba en contra de los valores defendidos por la Iglesia Católica.

Inspirado en la doctrina de la encíclica Quadragesimo Anno, publicó varios libros y fundó y dirigió la importante revista Mensaje, que se publica todavía hoy. Entre sus obras destacan ¿Es Chile un país católico?, El Humanismo social cristiano en los documentos de la jerarquía católica, Sindicalismo, historia, teoría y práctica, La crisis afectiva de la adolescencia y La crisis sacerdotal en Chile.

En el año 1977, la Iglesia católica chilena llevó a cabo los primeros trámites del proceso para la beatificación de Alberto Hurtado, el cual no comenzó realmente su curso ordinario hasta el año 1993, fecha en la que el papa Juan Pablo II dio su visto bueno al informe sobre la causa de beatificación. El 10 de octubre de 1994, Alberto Hurtado fue beatificado por el papa Juan Pablo II; once años después, en octubre de 2005, fue canonizado por Benedicto XVI. La festividad de San Alberto Hurtado se celebra el 18 de agosto.

SANTORAL DE HOY MARTES 18 DE AGOSTO DE 2020

 Alberto Hurtado Cruchaga, SantoAlberto Hurtado Cruchaga, Santo
Fundador del HOGAR DE CRISTO, 18 de agosto
Floro, Lauro y compañeros, SantosFloro, Lauro y compañeros, Santos
Mártires, 18 de agosto
Reinaldo de Concorégio, BeatoReinaldo de Concorégio, Beato
Obispo, 18 de agosto
Ángel María (José Sánchez Rodríguez), BeatoÁngel María (José Sánchez Rodríguez), Beato
Religioso y Mártir, 18 de agosto
Rosario Ciércoles Gascón, BeataRosario Ciércoles Gascón, Beata
Religiosa y Mártir, 18 de agosto
María Luisa Bermúdez Ruiz, BeataMaría Luisa Bermúdez Ruiz, Beata
Religiosa y Mártir, 18 de agosto
Micaela Hernán Martínez, BeataMicaela Hernán Martínez, Beata
Religiosa y Mártir, 18 de agosto
Paula Montaldi, BeataPaula Montaldi, Beata
Abadesa Clarisa, 18 de agosto
Elena, SantaElena, Santa
Reina, 18 de agosto

EL EVANGELIO DE HOY MARTES 18 DE AGOSTO DE 2020


Lecturas de hoy Martes de la 20ª semana del Tiempo Ordinario
Hoy, martes, 18 de agosto de 2020



Primera lectura
Lectura de la profecía de Ezequiel (28,1-10)

Me vino esta palabra del Señor: «Hijo de Adán, di al príncipe de Tiro: "Así dice el Señor: Se hinchó tu corazón, y dijiste: 'Soy Dios, entronizado en solio de dioses en el corazón del mar', tú que eres hombre y no dios; te creías listo como los dioses. ¡Si eres más sabio que Daniel!; ningún enigma se te resiste. Con tu talento, con tu habilidad, te hiciste una fortuna; acumulaste oro y plata en tus tesoros. Con agudo talento de mercader ibas acrecentando tu fortuna, y tu fortuna te llenó de presunción. Por eso, así dice el Señor: Por haberte creído sabio como los dioses, por eso traigo contra ti bárbaros pueblos feroces; desenvainarán la espada contra tu belleza y tu sabiduría, profanando tu esplendor. Te hundirán en la fosa, morirás con muerte ignominiosa en el corazón del mar. Tú, que eres hombre y no dios, ¿osarás decir: 'Soy Dios', delante de tus asesinos, en poder de los que te apuñalen? Morirás con muerte de incircunciso, a manos de bárbaros. Yo lo he dicho."» Oráculo del Señor.

Palabra de Dios


Salmo
Dt 32,26-27ab.27cd-28.30.35cd-36ab

R/. Yo doy la muerte y la vida

Yo pensaba: «Voy a dispersarlos
y a borrar su memoria entre los hombres.»
Pero no; que temo la jactancia del enemigo
y la mala interpretación del adversario. R/.

Que diría: «Nuestra mano ha vencido,
no es el Señor quien lo ha hecho.»
Porque son una nación que ha perdido el juicio. R/.

¿Cómo es que uno persigue a mil,
y dos ponen en fuga a diez mil?
¿No es porque su Roca los ha vendido,
porque el Señor los ha entregado? R/.

El día de su perdición se acerca,
y su suerte se apresura.
Porque el Señor defenderá a su pueblo
y tendrá compasión de sus siervos. R/.


Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Mateo (19,23-30):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Os aseguro que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Lo repito: Más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja que a un rico entrar en el reino de Dios.»
Al oírlo, los discípulos dijeron espantados: «Entonces, ¿quién puede salvarse?»
Jesús se les quedó mirando y les dijo: «Para los hombres es imposible; pero Dios lo puede todo.»
Entonces le dijo Pedro: «Pues nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido; ¿qué nos va a tocar?»
Jesús les dijo: «Os aseguro: cuando llegue la renovación, y el Hijo del hombre se siente en el trono de su gloria, también vosotros, los que me habéis seguido, os sentaréis en doce tronos para regir a las doce tribus de Israel. El que por mí deja casa, hermanos o hermanas, padre o madre, mujer, hijos o tierras, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna. Muchos primeros serán últimos y muchos últimos serán primeros.»

Palabra del Señor



Comentario al Evangelio de hoy martes, 18 de agosto de 2020
Edgardo Guzmán, cmf.

Queridos amigos y amigas:

En los capítulos 25–32, la segunda parte del Libro de Ezequiel, encontramos una colección de oráculos contra los pueblos vecinos de Israel que adoran otros dioses. Esos pueblos mostraban sentimientos de orgullo frente a Dios y representaban una constante tentación para el pueblo israelita que lo alejaba de Yahvé, su Dios. La lectura litúrgica de hoy contiene los oráculos dirigidos al príncipe de Tiro y a todo su reino, que constituía una gran potencia marina. El juicio es pronunciado con severidad e ironía. Lo que se denuncia es el orgullo desmesurado hasta el punto de usurpar el puesto de Dios.

El príncipe de Tiro pretende ser una divinidad, pretende dominar no solo las islas, sino incluso el vasto mar. Él se exalta sobre todo de su inteligencia, sabiduría y versatilidad en lo diplomático, se enorgullece de su capacidad para enriquecerse. Su autodivinización, a parte de ser una locura, es un grave atentado contra la gloria de Yahvé único Dios, creador y señor del universo. El orgullo, la exaltación, la autodivinización: es en el fondo el pecado que siempre a amenazado al ser humano desde el inicio. Como aparece en el libro del Génesis, el hombre y la mujer que no saben vivir como creaturas y quieren convertirse en Dios.

En el Evangelio vemos que después de que el joven rico se marcho triste, también Jesús en un tono de lamento comenta: «Les aseguro que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos». La imagen elocuente del camello contribuye a dar mayor énfasis a la afirmación. Es comprensible que los discípulos se sorprendieran y quedarán desconcertados. El evangelista coloca un hermoso detalle: «Jesús los quedó mirando», esa mirada de Jesús penetra el corazón de sus discípulos tomando su perplejidad. Han comprendido perfectamente. Seguirle en modo radical es difícil, más aún, imposible con solo las fuerzas humanas, pero no se trata de algo que se alcanza a punta de voluntarismo. El seguimiento de Jesús es una gracia, un don y una tarea. Deben recordar que el sujeto de la vocación recibida no son ellos mismos, sino Dios, para quien no hay «nada imposible».

A este punto, Pedro, con la sinceridad e impulsividad que lo caracteriza, descubre con sorpresa la diferencia entre la situación de ellos y la de aquel joven rico. Ellos han recibido ese don especial, han dejado todo para seguir a Jesús, entonces: «¿qué será de ellos?» (v. 27). El joven rico se fue triste, porque dijo que “no”, pero ¿qué pasa con los que dicen que “sí”? Jesús conociendo la pequeñez del corazón humano y que necesita seguridad y motivaciones, les asegura que la recompensa es grande bien sea en el tiempo, como en la eternidad. De hecho, «Dios es más grande que nuestro corazón» (1 Jn 3,20), no se deja ganar en generosidad, lo poco a lo que hemos renunciado por su amor, vendrá recompensado «cien veces más».

Fraternalmente,
Edgardo Guzmán, cmf.
eagm796@hotmail.com