Páginas

viernes, 20 de enero de 2017

ORACIÓN A SAN SEBASTIÁN PARA PEDIR FAVORES


Oración a San Sebastián para pedir favores

Glorioso san Sebastián 
que alcanzaste de Dios tanta fe y caridad,
que llegaste a sacrificar tu vida
por obedecer a Dios 
y socorrer fielmente
a tus hermanos cristianos.

Ahora que vives junto
a Dios escucha las plegarias y súplicas
de los que te invocan con gratitud, fe y devoción, 
y acuden a ti desde los campos,
pueblos y ciudades. Mártir de Cristo,
alcánzanos de Dios que,
confesando nuestra fe, 
acojamos el Reino anunciado por Jesucristo 
con verdadero espíritu de penitencia y vivamos como hijos de Dios.

Que nuestros hogares sean verdaderos templos de amor 
en donde florezca la santidad, reinen el bienestar, la alegría y la paz.

Que en nuestro trabajo reinen la justicia y la concordia.

Líbranos de todo egoísmo y maldad para que, fraternalmente unidos,
vivamos en esta hermosa tierra que Dios nos ha dado
de acuerdo con los valores del Reino: 
especialmente la verdad, la justicia y el amor.

San Sebastián mártir glorioso, lleva nuestros ruegos ante Dios
y concédenos tu especial intercesión
para que podamos obtener lo que aquí pedimos:

(Hacer tu Petición)

San Sebastián, atiende nuestras plegarias,
ayúdanos a conseguir lo que solicitamos y danos fuerza y confianza,
para que siguiendo tu ejemplo de fe, esperanza y caridad 
podamos alcanzar la vida eterna 
que Jesús promete a los que perseveran hasta el fin
y para que bajo la protección de María,
nuestra Madre, lleguemos a Él,
fuente de eterna felicidad.

Amén.

SAN SEBASTIÁN, PATRONO DE ARQUEROS, SOLDADOS Y ATLETAS, 20 DE ENERO


San Sebastián, patrono de arqueros, soldados y atletas
20 de enero




 (ACI).- El 20 de enero es fiesta de San Sebastián, patrono de arqueros, soldados y atletas. Su nombre significa “Digno de respeto, venerable” y utilizaba su cargo de militar romano para ayudar a los cristianos prisioneros. Entérese el porqué es también considerado patrono contra las flechas envenenadas.

Se dice que San Sebastián era Capitán de la Guardia del Palacio Imperial en Roma y cierto día un mártir estaba por desanimarse a raíz de las lágrimas de sus familiares. El Santo lo animó a ofrecer a mantenerse firme y a dar la vida por Jesucristo. De esta manera el creyente pudo dar testimonio con el glorioso martirio.


Más adelante, San Sebastián fue denunciado ante el emperador por ser cristiano. Maximino lo llamó y le ofreció ser ascendido si dejaba de ser cristiano, de lo contrario sería degradado y atravesado por flechas.

El Santo respondió diciendo que seguiría siendo seguidor de Cristo hasta el final y fue condenado a morir por flechas por el año 300. Su sepulcro en las catacumbas de la vía Apia, fue venerado por los cristianos desde muy antiguo.

En Roma se edificó una basílica en su honor y por siglos ha sido invocado como patrono contra las flechas envenenadas, las plagas y enfermedades.


San Sebastián, Mártir
20 de Enero


Sebastián, hijo de familia militar y noble, era oriundo de Narbona, pero se había educado en Milán. Llegó a ser capitán de la primera corte de la guardia pretoriana. Era respetado por todos y apreciado por el emperador, que desconocía su cualidad de cristiano. Cumplía con la disciplina militar, pero no participaba en los sacrificios idolátricos. Además, como buen cristiano, ejercitaba el apostolado entre sus compañeros, visitaba y alentaba a los cristianos encarcelados por causa de Cristo. Esta situación no podía durar mucho, y fue denunciado al emperador Maximino quien lo obligó a escoger entre ser su soldado o seguir a Jesucristo.

El santo escogió la milicia de Cristo; desairado el Emperador, lo amenazó de muerte, pero San Sebastián, convertido en soldado de Cristo por la confirmación, se mantuvo firme en su fe. Enfurecido Maximino, lo condenó a morir asaeteado: los soldados del emperador lo llevaron al estadio, lo desnudaron, lo ataron a un poste y lanzaron sobre él una lluvia de saetas, dándolo por muerto. Sin embargo, sus amigos que estaban al acecho, se acercaron, y al verlo todavía con vida, lo llevaron a casa de una noble cristiana romana, llamada Irene, que lo mantuvo escondido en su casa y le curó las heridas hasta que quedó restablecido.

Sus amigos le aconsejaron que se ausentara de Roma, pero el santo se negó rotundamente pues su corazón ardoroso del amor de Cristo, impedía que él no continuase anunciando a su Señor. Se presentó con valentía ante el Emperador, desconcertado porque lo daba por muerto, y el santo le reprochó con energía su conducta por perseguir a los cristianos. Maximino mandó que lo azotaran hasta morir, y los soldados cumplieron esta vez sin errores la misión y tiraron su cuerpo en un lodazal. Los cristianos lo recogieron y lo enterraron en la Vía Apia, en la célebre catacumba que lleva el nombre de San Sebastián.

El culto a San Sebastián es muy antiguo; es invocado contra la peste y contra los enemigos de la religión, y además es llamado además el Apolo cristiano ya que es uno de los santos más reproducidos por el arte en general.

EL EVANGELIO DE HOY 20 DE ENERO DEL 2017


Simplemente estar contigo
Marcos 3, 13-19. II Viernes de Tiempo Ordinario. Ciclo A.


Por: H. Adrián Olvera de la Cruz LC | Fuente: www.missionkits.org 



En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Vengo hoy a Ti, Señor, porque te quiero, porque te necesito… porque sé que no puedo nada sin Ti… y todo contigo. Hoy quiero estar un momento en tu presencia.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)


Del santo Evangelio según san Marcos 3, 13-19
En aquel tiempo, Jesús subió al monte, llamó a los que él quiso, y ellos lo siguieron. Constituyó a doce para que se quedaran con él, para mandarlos a predicar y para que tuvieran el poder de expulsar a los demonios.
Constituyó entonces a los doce: a Simón, al cual le impuso el nombre de Pedro; después, a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, a quienes dio el nombre de Boanergues, es decir "hijos del trueno"; a Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago el de Alfeo, Tadeo, Simón el Cananeo y a Judas Iscariote, que después lo traicionó.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
Por diversas razones, en algún momento de la vida, nos hemos visto alejados de las personas que amamos. Son en estos momentos cuando, irónicamente, nos sentimos más cerca de ellos. Aunque no estén en cuerpo, podemos sentirlos, pues los llevamos en el corazón. Están con nosotros ya que ocupan nuestro pensamiento; protagonizan nuestras conversaciones y, también, son dueños, muchas veces, de nuestras lágrimas… producidas por la tristeza de extrañarles o la alegría de recordarles.
Cuando experimentamos esos momentos, casi inconscientemente suspiramos: «quisiera estar con ella… con él… con ellos». Daríamos cualquier cosacon tan sólo estar junto a la persona que se adueña de nuestros pensamientos.
Estar con alguien se convierte en algo tan importante que quisiéramos darle el valor de lo eterno. Estar, con todo lo que la palabra implica, descubrimos que tiene una profundidad… que cuando verdaderamente se está ni siquiera se quiere hablar, pues las palabras podrían perturbar lo que sólo una mirada puede decir…puede expresar.
Señor, éste es tu deseo, que yo esté contigo. Haciendo lo que esté haciendo, quieres que esté contigo. Trabajo, estudios… ahí… sólo contigo. Sólo así es cuando puedo ser un verdadero apóstol. Sólo así es cuando puedo predicar tu amor.
Estar contigo es vivir mi vida haciendo vida aquello que he conocido…al estar contigo. Gracias, Señor, por estar conmigo.
«¿Qué nos da el Señor? Nos regala su amistad fiel, que no la retirará jamás. El Señor es el amigo para siempre. Además, si tú lo decepcionas y te alejas de él, Jesús sigue amándote y estando contigo, creyendo en ti más de lo que tú crees en ti mismo. Esto es lo específico del amor que nos enseña Jesús. Y esto es muy importante. Porque la amenaza principal, que impide crecer bien, es cuando no importas a nadie —esto es triste—, cuando te sientes marginado. En cambio, el Señor está siempre junto a ti y está contento de estar contigo.»
(Homilía de S.S. Francisco, 24 de abril de 2016).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
En un momento de mi día buscar el tiempo para visitar una capilla y hacer una visita frente al Sagrario para estar verdaderamente con el Señor.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.