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viernes, 4 de septiembre de 2015

SANTO MOISÉS, PROFETA DEL ANTIGUO TESTAMENTO, 4 DE SEPTIEMBRE



Moisés, Santo


Profeta del Antiguo Testamento, 4 de septiembre 


Por: . | Fuente: Archidiócesis de Madrid 



Profeta del Antiguo Testamento
Febrero 24


Salvado de las aguas. Criado junto al Faraón. Elegido para salvar a su pueblo. Instrumento de Dios en las plagas. Caudillo desde el mar Rojo. Y ya en el desierto, el hombre de la Alianza: Amigo de Dios, padre del pueblo, legislador, juez, guerrero, libertador...

Es el hombre fuerte como un titán que se resiste a aceptar las debilidades de su pueblo.

Dios permite su fracaso. Viendo ya la Tierra Prometida, muere con la esperanza incumplida de entrar en la tierra de Canaán.

El que extendió su mano en el mar y lo secó o hizo brotar agua de la roca en el desierto, o consiguió de Dios el maná y las codornices para quitar la hambruna no disfruta su máximo proyecto humano: entrar en la Tierra de Promisión.

El sinsabor de la derrota humana es permitido por Dios para que reconozcamos nuestra flaqueza. El fracaso en lo humano marca la dependencia del creador.

LOS SANTOS DE HOY: VIERNES 4 DE SEPTIEMBRE DEL 2015

Pedro Sánchez Barba, BeatoPedro Sánchez Barba, Beato
Sacerdote y mártir, 4 de septiembre
Buenaventura Muñoz Martínez, BeatoBuenaventura Muñoz Martínez, Beato
Mártir, 4 de septiembre
Nicolás Rusca, BeatoNicolás Rusca, Beato
Sacerdote y mártir, 4 de septiembre
Irmgarda (Irma) de Süchteln, SantaIrmgarda (Irma) de Süchteln, Santa
Condesa, Septiembre 4
Marcelo de Chalons-sur-Saone, SantoMarcelo de Chalons-sur-Saone, Santo
Mártir, Septiembre 4
Ida de Herzfeld, SantaIda de Herzfeld, Santa
Viuda, Septiembre 4
Moisés SantoMoisés Santo
Gran caudillo que libró a los israelitas de la esclavitud de Egipto, Septiembre 4
Bonifacio I, SantoBonifacio I, Santo
XLII Papa, Septiembre 4
Rosalía, SantaRosalía, Santa
Ermitaña, 4 de septiembre
Moisés, SantoMoisés, Santo
Profeta del Antiguo Testamento, 4 de septiembre

SANTA ROSALÍA, ERMITAÑA, 4 DE SEPTIEMBRE


Rosalía, Santa
Rosalía, Santa


Ermitaña, 4 de septiembre


Fuente: ACIprensa.com 



Ermitaña

Martirologio Romano: En Palermo, de Sicilia, santa Rosalía, virgen, de quien se dice que practicó la vida solitaria en el monte Pellegrino (s. XII).

Etimología: Rosalía = rosal florido”. Viene de la lengua griega

Vivió en el siglo XII y murió hacia 1160.

Aunque se desconocen datos sobre su patria y vida, una leyenda asegura que a los 14 años se retiró a una cueva del monte Coscina y luego a otra del monte Pellegrino, cercano a Palermo.

En la Edad Media se le dedicaron varias iglesias y se le consideró Protectora y Patrona de Palermo.

Sus restos fueron descubiertos un 15 de julio y el Papa Urbano VIII la incluyó como santa en el Martirologio.

Se le invoca como abogada contra la peste y los terremotos. La iconografía la presenta como ermitaña o bien revestida con hábito agustino.

Sus principales atributos son: una corona de rosas, en alusión a su nombre; y un crucifiJo y una calavera, por su ascesis.

EL EVANGELIO DE HOY: VIERNES 4 DE SEPTIEMBRE DEL 2015


Los discípulos de Jesús y el ayuno
Parábolas



Lucas 5, 33-39. Tiempo Ordinario. De qué nos sirve ayunar, rezar mucho, si no está presente Cristo en nuestra vida diaria. 


Por: P . Clemente González | Fuente: Catholic.net 



Del santo Evangelio según san Lucas 5, 33-39
En aquel tiempo los escribas y fariseos le dijeron a Jesús: Los discípulos de Juan ayunan frecuentemente y recitan oraciones, igual que los de los fariseos, pero los tuyos comen y beben. Jesús les dijo: ¿Podéis acaso hacer ayunar a los invitados a la boda mientras el novio está con ellos? Días vendrán en que les será arrebatado el novio; entonces ayunarán en aquellos días. Les dijo también una parábola: Nadie rompe un vestido nuevo para echar un remiendo a uno viejo; de otro modo, desgarraría el nuevo, y al viejo no le iría el remiendo del nuevo. Nadie echa tampoco vino nuevo en odres viejos; de otro modo, el vino nuevo reventaría los pellejos, el vino se derramaría, y los odres se echarían a perder; sino que el vino nuevo debe echarse en odres nuevos. Nadie, después de beber el vino añejo, quiere del nuevo porque dice: El añejo es el bueno.

Oración introductoria
Señor Dios, aparta de mi oración esa actitud farisaica que me impide ver las maravillas de las inspiraciones de tu Espíritu Santo. Soy culpable de ese juicio severo que tiende a ver solo lo negativo. La oración es un don tuyo, concédemelo. Dame la gracia de orar con un corazón contrito que auténticamente busque renovarse espiritualmente.

Petición
Te pido el don de la humildad, para disponerme a recibir gratuitamente el don de la oración.

Meditación del Papa Francisco
La libertad cristiana está en la docilidad a la Palabra de Dios. Debemos estar siempre preparados a acoger la «novedad» del Evangelio y las «sorpresas de Dios». La Palabra de Dios, que es viva y eficaz, discierne los sentimientos y los pensamientos del corazón. Y para acoger verdaderamente la Palabra de Dios, hay que tener una actitud de «docilidad».
La Palabra de Dios es viva y por eso viene y dice lo que quiere decir: no lo que yo espero que diga o lo que me gustaría que dijera. Es una Palabra libre y también un sorpresa porque nuestro Dios es un Dios de las sorpresas.
La libertad cristiana y la obediencia cristiana son docilidad a la Palabra de Dios, y hay que tener esa valentía de convertirse en odres nuevos, para este vino nuevo que viene continuamente. Esta valentía de discernir siempre: discernir, digo, no relativizar. Discernir siempre qué hace el Espíritu en mi corazón, qué quiere el Espíritu en mi corazón, dónde me lleva el Espíritu en mi corazón. Y obedecer. Discernir y obedecer. Pidamos hoy la gracia de la docilidad a la Palabra de Dios, a esta Palabra de Dios, y esta Palabra que es viva y eficaz, que discierne los sentimientos y los pensamientos del corazón. (Cf Homilía de S.S. Francisco, 20 de enero de 2014, en Santa Marta).
Reflexión
Todos deseamos momentos para estar con las personas o la persona que nos cae bien, que estimamos, que amamos. Entre amigos, el novio con la novia o entre esposos. Y cuando alguien viene a arrebatarnos esos momentos más los anhelamos y más deseamos que vengan.

A los apóstoles les sucede algo semejante en este evangelio porque los fariseos, no sabiendo ya por donde fastidiar, pretenden hacer ver a Jesús que los suyos no se comportan como los discípulos de Juan que ayunan y rezan mucho. Pero perfectamente podríamos haberles dicho a los fariseos aquella frase de san Agustín que dice: "teme a la gracia de Dios que pasa y no vuelve". Y los apóstoles preferían disfrutar de la compañía del Mesías que ayunar y estar lejos de Él. O también les podríamos haber respondido con la misma frase que Jesús le dijo a la mujer de Betania: "Marta, Marta muchas cosas te preocupan pero una sola es importante y María ha elegido la mejor", que fue la de sentarse a sus pies.

He aquí por tanto la clave de este evangelio, la presencia de Cristo en nuestra vida. De qué nos sirve ayunar, rezar mucho, hacer penitencia si a la hora de la hora no acompañamos a Cristo donde realmente está que es en la Eucaristía.

Estaríamos ayunando y rezando por deporte. Por ello, si hasta ahora nuestros rezos o ayunos son sin una presencia de Cristo dominical o más frecuente pensemos que estamos desaprovechando la verdadera gracia de Dios para nuestra alma, que es la de estar cerca de Él.

Petición
Señor, que aprenda a olvidarme de mí, para escucharte y entender Tu Voluntad. El ayuno no es sólo algo externo como lo veían los fariseos. El ayuno va al interior del hombre. Consiste en cumplir lo que Tú me pides y amarte con todo el corazón.