viernes, 30 de diciembre de 2016

EL EVANGELIO DE HOY VIERNES 30 DICIEMBRE 2016, SAGRADA FAMILIA


¡Dios quiso tener una familia!
Mateo 2, 13-15. 19-23, Sagrada Familia, Ciclo A,


Por: H. Cristian Gutiérrez LC | Fuente: www.missionkits.org 



En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Gracias, Señor, por el don de la familia. En ella has querido dejarme uno de los mayores regalos que has dado al hombre y, por medio de ella, has querido demostrarme el amor y cuidado que me tienes. La familia es la mejor imagen tuya. Gracias por mi familia. Aumenta mi fe en Ti y en tu Palabra. Acrecienta mi confianza en tus promesas y tu presencia cercana. Haz crecer mi amor a Ti y jamás permitas que nada ni nadie me separe de Ti.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)


Del santo Evangelio según san  Mateo 2, 13-15. 19-23
Después de que los magos partieron de Belén, el ángel del Señor se le apareció en sueños a José y le dijo: "Levántate, toma al niño y a su Madre, y huye a Egipto. Quédate allá hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo".
José se levantó y esa misma noche tomó al niño y a su Madre y partió para Egipto, donde permaneció hasta la muerte de Herodes. Así se cumplió lo que dijo el Señor por medio del profeta: ‘De Egipto llamé a mi Hijo’.
Después de muerto Herodes, el ángel del Señor se le apareció en sueños a José y le dijo: "Levántate, toma al niño y a su Madre y regresa a la tierra de Israel, porque ya murieron los que intentaban quitarle la vida al niño".
Se levantó José, tomó al niño y a su Madre y regresó a tierra de Israel. Pero, habiendo oído decir que Arquelao reinaba en Judea en lugar de su padre, Herodes, tuvo miedo de ir allá, y advertido en sueños, se retiró a Galilea y se fue a vivir en una población llamada Nazaret. Así se cumplió lo que habían dicho los profetas: ‘Se le llamará nazareno’.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
Hoy celebramos el día de la Sagrada Familia. Quieres que continúe contemplando el hecho de tu Encarnación. No es una bonita historia, un mito o una leyenda, una fábula o una invención. Es real. Tú te hiciste hombre por amor a mí.
Es maravilloso pensar que tienes en tan alto precio la familia, que quisiste tener una. ¡Dios quiso tener una familia! Una familia que como puedo ver en el pasaje de hoy te protege de los que quieren hacerte mal, te cuida, te alimenta, te educa, te ama.
Cuánto debe sorprenderme este hecho de que siendo fuerte te quisiste hacer débil; siendo omnipotente te hiciste necesitado de una sencilla mujer y un pobre carpintero; siendo la libertad eterna te sometiste a unos padres; teniéndolo todo en el cielo te hiciste pobre; recibiendo la adoración de miles de tronos, potestades, ángeles y arcángeles, preferiste los regalos y la veneración de unos sencillos pastores y unos pocos sabios.
La familia es el lugar que pensaste para que cada hombre pudiera sentirse acogido, querido, amado. La familia es el mejor modelo de Ti, Dios mío. Eres Trinidad, por lo tanto eres familia. No quisiste venir a este mundo solo, descender entre nubes, sostenido por querubines. No. Quisiste sentir el beso, la caricia, la voz dulce de una madre, el abrazo seguro, el ejemplo veraz y el sonreír de un padre. Tú también aprendiste a decir “mamá” y “papá”. Estas dos palabras las dijiste Tú, las dijo Dios.
Gracias, Señor, por la familia que me has dado. Dame la gracia de valorar mi familia y colaborar siempre por defenderla y mantenerla unida, orante, fervorosa y cercana a Ti. Concédeme un día poder llegar a tu presencia con todos mis familiares y así disfrutar de Ti por toda la eternidad.
«Jesús mismo tuvo que ser protegido. Tenía un protector en la tierra: san José. Tenía una familia humana, la Sagrada Familia de Nazaret. Así nos recuerda la importancia de proteger a nuestras familias, y las familias más amplias como son la Iglesia, familia de Dios, y el mundo, nuestra familia humana. Lamentablemente, en nuestros días, la familia con demasiada frecuencia necesita ser protegida de los ataques y programas insidiosos, contrarios a todo lo que consideramos verdadero y sagrado, a lo más hermoso y noble de nuestra cultura.»
(Homilía de S.S. Francisco, 18 de enero de 2015).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Rezaré un padrenuestro por las familias divididas a causa de la guerra.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

jueves, 29 de diciembre de 2016

SANTO TOMÁS BECKET DE CANTERBURY, MÁRTIR INGLÉS, 29 DICIEMBRE


Hoy 29 de diciembre se celebra a Santo Tomás Becket de Canterbury, mártir inglés


 (ACI).- "Muero voluntariamente por el nombre de Jesús y en defensa de la Iglesia", dijo Santo Tomás Becket de Canterbury antes de morir como mártir y fiel a la Iglesia por oponerse a las intenciones del rey de Inglaterra de controlar a la Iglesia local. Su fiesta es cada 29 de diciembre.

Santo Tomás nació en Londres, Inglaterra, en 1118 y en una familia trabajadora. Fue educado por los monjes de la abadía de Merton en Surrey y llegó a estudiar en la Universidad de París. Cuando murió su padre cayó en aprietos económicos y se convirtió en empleado de la corte del Arzobispo Theobald de Canterbury. Se ganó la confianza del Obispo y llegó a viajar con él por Francia, Roma y otros lugares. Del mismo modo se hizo amigo del rey.


En 1154 fue ordenado Diácono y sirvió como negociador de los asuntos de la Iglesia con la corona. Luego, a sugerencia del Arzobispo Theobald, llegó a ser canciller de Inglaterra y administró la ley con sabiduría e imparcialidad. Posteriormente, lo ordenaron sacerdote y al día siguiente recibió la consagración episcopal.

Como Arzobispo se entregó por completo al servicio de Dios, desarrollando un profundo amor por la Eucaristía. Al negarse a los intereses de Enrique II, que deseaba que la Iglesia en Inglaterra estuviera sujeta al poder del rey, optó por el exilio en Francia.


El rey de Francia persuadió al rey inglés Enrique II a ir donde Tomás para hacer las paces. Tras volver a su patria, las discusiones comenzaron otra vez. El rey Enrique escuchó, desde Normandía, que el Papa había excomulgado a los Obispos recalcitrantes por usurpar los derechos del Obispo de Canterbury y que Santo Tomás se mantendría firme hasta que los Prelados prometieran obediencia al Sumo Pontífice.

El rey se encolerizó y dijo: "¿No hay nadie que me libre de este sacerdote turbulento?". Cuatro caballeros lo escucharon y decidieron tomar el asunto en sus manos.

El 29 de diciembre de 1170, los caballeros con una tropa de soldados se aparecieron a las afueras de la Catedral de Canterbury exigiendo ver al Arzobispo. Los presbíteros intentaron proteger al Santo y lo forzaron a refugiarse en la Iglesia, pero Tomás les prohibió bajo obediencia cerrar la puerta diciendo que "una iglesia no debe convertirse en un castillo".

En la penumbra de la Iglesia, los caballeros reclamaban al Arzobispo como traidor. "Aquí estoy", dijo Tomás, "No traidor, sino un sacerdote de Dios. Me extraña que con tal atuendo entren en la iglesia de Dios. ¿Qué quieren conmigo?"

Un caballero levantó la espada para atacarle, pero uno que andaba con Santo Tomás lo protegió con el brazo. Los cuatro caballeros arremetieron juntos y asesinaron al Arzobispo en los peldaños del santuario.


Mientras moría, Santo Tomás repetía los nombres de sus predecesores asesinados antes que él: “San Denis, San Elphege de Canterbury”. Según un testigo, sus últimas palabras fueron: "Muero voluntariamente por el nombre de Jesús y en defensa de la Iglesia".

El crimen causó indignación y el rey Enrique fue forzado a hacer penitencia pública y construir el monasterio en Witham, Somerset.

400 años después, cuando el rey Enrique Octavo rompió la unidad de la Iglesia, Santo Tomás Becket fue sacado del calendario de los santos de Inglaterra, su santuario fue arrasado y las reliquias terminaron quemadas (algunos dicen que se transfirieron a Stoneyhurst).

Asimismo, este otro rey también llamado Enrique (VIII) mandó matar a otro gran mártir inglés conocido como Santo Tomás Moro.

SANTORAL DE HOY JUEVES 29 DICIEMBRE 2016

Guillermo (William) Howard, BeatoGuillermo (William) Howard, Beato
Mártir, Diciembre 29
Gerardo Cágnoli de Valenza, BeatoGerardo Cágnoli de Valenza, Beato
Franciscano, Diciembre 29
José Perpiñá Nácher, BeatoJosé Perpiñá Nácher, Beato
Mártir Laico, Diciembre 29
José Aparicio Sanz, BeatoJosé Aparicio Sanz, Beato
Sacerdote y Màrtir, Diciembre 29
Enrique Juan Requena, BeatoEnrique Juan Requena, Beato
Sacerdote y Màrtir, Diciembre 29
Esteban de Caiazzo, SantoEsteban de Caiazzo, Santo
Obispo, 29 de octubre
David, SantoDavid, Santo
Rey y Profeta, Diciembre 29
Juan Bautista Ferreres Boluda, BeatoJuan Bautista Ferreres Boluda, Beato
Mártir Jesuita, Diciembre 29
Tomás Becket, SantoTomás Becket, Santo
Memoria Litúrgica, 29 de diciembre

EL EVANGELIO DE HOY JUEVES 29 DICIEMBRE 2016


Un día cualquiera, en medio de innumerable gente, en un niño común
Lucas 2, 22-35, V día de la Octava de Navidad, Ciclo A, Jesús es presentadc en el templo.


Por: H. Balam Loza, LC | Fuente: www.missionkits.org 



En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Espíritu Santo, fuente de luz, ilumíname. Dame tu luz y tu gracia para que pueda reconocer a Jesús. Que en medio de las fiestas navideñas pueda descubrir el gran misterio que hay detrás de todo. Ayúdame para que no me quede en la mera celebración superficial, sino que pueda tener un encuentro profundo con Jesús, que viene a mi corazón.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)


Del santo Evangelio según Lucas 2,22-35
Transcurrido el tiempo de la purificación de María, según la ley de Moisés, Ella y José llevaron al niño a Jerusalén para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley: Todo primogénito varón será consagrado al Señor, y también para ofrecer, como dice la ley, un par de tórtolas o dos pichones.
Vivía en Jerusalén un hombre llamado Simeón, varón justo y temeroso de Dios, que aguardaba el consuelo de Israel; en él moraba el Espíritu Santo, el cual le había revelado que no moriría sin haber visto antes al Mesías del Señor. Movido por el Espíritu, fue al templo, y cuando José y María entraban con el niño Jesús. para cumplir con lo prescrito por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios, diciendo:
"Señor, ya puedes dejar morir en paz a tu siervo, según lo que me habías prometido, porque mis ojos han visto a tu Salvador, al que has preparado para bien de todos los pueblos, luz que alumbra a las naciones y gloria de tu pueblo, Israel".
El padre y la Madre del niño estaban admirados de semejantes palabras. Simeón los bendijo, y a María, la Madre de Jesús, le anunció: "Este niño ha sido puesto para ruina y resurgimiento de muchos en Israel, como signo que provocará contradicción, para que queden al descubierto los pensamientos de todos los corazones. Y a ti, una espada te atravesará el alma".
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
El corazón del hombre busca a Dios. El anciano Simeón había buscado durante toda su vida, había esperado con paciencia y al fin su alma se había saciado del agua viva. Había visto a Jesús. Y eso era el mayor regalo que podía desear.
Cuántas veces podemos buscar a Jesús y quedarnos en la superficie. Celebramos la Navidad, vamos a misa, compramos y regalos y al final pasan los días y nuestra vida sigue igual. No ha cambiado mucho y decimos, bueno, otra vez a trabajar, otra vez clases, otra vez la vida ordinaria… Pareces que nada ha cambiado.
Sin embargo, es un momento para hacer una pausa y descubrir que ese Jesús al que buscamos está dentro y quiere que entablar una amistad con nosotros. Por esto es necesario el Espíritu Santo que nos indique el camino que tenemos que seguir. Que nos descubra a Jesús en medio de cualquier circunstancia.
Pensemos un poco en Simeón. Era un anciano, tal vez un poco ciego, y supo descubrir al Mesías en medio de una innumerable cantidad de gente que iba y venía, en un día cualquiera, en un niño común. ¿Por qué? Porque supo escuchar la voz del Espíritu que lo guiaba; supo ver en ese niño al esperado por todos.
«También nosotros, como María y Simeón, queremos llevar hoy en brazos a Jesús para que se encuentre con su pueblo, y seguro que lo conseguiremos si nos dejamos poseer por el misterio de Cristo. Guiemos el pueblo a Jesús dejándonos a su vez guiar por Él. Eso es lo que debemos ser: guías guiados.»
(Homilía de S.S. Francisco, 2 de febrero de 2015).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Hoy, Señor, voy a hacer una hora Eucarística o al menos voy a hacer un rato de adoración, para pensar en lo verdaderamente importante de la Navidad y renovar la gratitud y la alegría de saber que Tú vienes a mi corazón.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

miércoles, 28 de diciembre de 2016

SANTOS INOCENTES, 28 DE DICIEMBRE


Hoy 28 de diciembre se celebra a los Santos Inocentes, los niños que murieron por Cristo


 (ACI).- “Todavía no hablan, y ya confiesan a Cristo. Todavía no pueden entablar batalla valiéndose de sus propios miembros, y ya consiguen la palma de la victoria”, dijo una vez San Quodvultdeus al exhortar a los fieles sobre los Santos Inocentes, los niños que murieron por Cristo y cuya fiesta se celebra el 28 de diciembre.

De acuerdo al relato de San Mateo, el rey Herodes mandó a matar en Belén y sus alrededores a los niños menores de dos años, al verse burlado por los Reyes Magos, quienes regresaron a sus países por otra ruta para no revelarle dónde estaba el Mesías.


En el siglo IV se instituyó esta fiesta para venerar a estos niños que murieron como mártires. La tradición oriental los recuerda el 29 de diciembre, mientras que la latina, el 28.

Posteriormente, San Quodvultdeus, Padre de la Iglesia del Siglo V y Obispo de Cartago (norte de África), dio un sermón sobre este lamentable hecho.

“¿Qué temes, Herodes, al oír que ha nacido un Rey? Él no ha venido para expulsarte a ti, sino para vencer al Maligno. Pero tú no entiendes estas cosas, y por ello te turbas y te ensañas, y, para que no escape el que buscas, te muestras cruel, dando muerte a tantos niños”, expresó.

Más adelante el Santo le señala al rey asesino: “Matas el cuerpo de los niños, porque el temor te ha matado a ti el corazón. Crees que, si consigues tu propósito, podrás vivir mucho tiempo, cuando precisamente quieres matar a la misma Vida”.

“Los niños, sin saberlo, mueren por Cristo; los padres hacen duelo por los mártires que mueren. Cristo ha hecho dignos testigos suyos a los que todavía no podían hablar”, enfatizó San Quodvultdeus.

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Santos Inocentes Martires
28 de Diciembre


El día de hoy se conmemora a los Niños Inocentes que el cruel Herodes mandó matar.

Según señala el Evangelio de San Mateo, Herodes llamó a los Sumos Sacerdotes para preguntarles en qué sitio exacto iba a nacer el rey de Israel, al que habían anunciado los profetas. Ellos le contestaron: "Tiene que ser en Belén, porque así lo anunció el profeta Miqueas diciendo: "Y tú, Belén, no eres la menor entre las ciudades de Judá, porque de ti saldrá el jefe que será el pastor de mi pueblo de Israel" (Miq. 5, 1).

Entonces Herodes se propuso averiguar exactamente dónde estaba el niño, para después mandar a sus soldados a que lo mataran. Y fingiendo dijo a los Reyes Magos: - "Vayan y averiguen acerca de ese niño, cuando lo encuentren regresan y me lo informan, para ir yo también a adorarlo". Los magos se fueron a Belén guiados por la estrella que se les apareció otra vez, al salir de Jerusalén, y llenos de alegría encontraron al Divino Niño Jesús junto a la Virgen María y San José; lo adoraron y le ofrecieron sus regalos de oro, incienso y mirra. En sueños recibieron el aviso divino de que no volvieran a Jerusalén y regresaron a sus países por otros caminos, y el pérfido Herodes se quedó sin saber dónde estaba el recién nacido. Esto lo enfureció hasta el extremo, por lo que rodeó con su ejército la pequeña ciudad de Belén, y dio la orden de matar a todos los niñitos menores de dos años, en la ciudad y alrededores.

El mismo evangelista San Mateo afirmará que en ese día se cumplió lo que había avisado el profeta Jeremías: "Un griterío se oye en Ramá (cerca de Belén), es Raquel (la esposa de Israel) que llora a sus hijos, y no se quiere consolar, porque ya no existen" (Jer. 31, 15).

EL EVANGELIO DE HOY MIÉRCOLES 28 DICIEMBRE, SANTOS INOCENTES


Obedecer con prontitud, porque se confía
Mateo 2, 13-18. Santos Mártires Inocentes. Ciclo A.


Por: H. Rubén Tornero, LC | Fuente: www.missionkits.org 



En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Jesús, te doy gracias de todo corazón por este momento que me regalas para tener un encuentro personal contigo. Amado Jesús, creo en Ti. Creo que te has hecho hombre porque me amas y quieres que yo también te amé. Confío en Ti. Confío en que puedo abandonarme en tus manos. Confío en tus obras, pues aunque no siempre las entienda, sé que Tú sólo quieres y haces lo que es mejor para mí. Te amo, Jesús, por ser Tú quien eres y porque me amas así como soy. Gracias por todo, Jesús.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)


Del santo Evangelio según san Mateo 2, 13-18
Después de que los magos partieron de Belén, el ángel del Señor se le apareció en sueños a José y le dijo: "Levántate, toma al niño y a su Madre, y huye a Egipto. Quédate allá hasta que yo te avise porque Herodes va a buscar al niño para matarlo".
José se levantó y esa misma noche tomó al niño y a su Madre y partió para Egipto, donde permaneció hasta la muerte de Herodes. Así se cumplió lo que dijo el Señor por medio del profeta: De Egipto llamé a mi hijo.
Cuando Herodes se dio cuenta de que los magos lo habían engañado, se puso furioso y mandó matar, en Belén y sus alrededores, a todos los niños menores de dos años, conforme a la fecha que los magos le habían indicado.
Así se cumplieron las palabras del profeta Jeremías: En Ramá se ha escuchado un grito, se oyen llantos y lamentos: es Raquel que llora por su hijos y no quiere que la consuelen, porque ya están muertos.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
San José, hoy te miro en el Evangelio y encuentro en ti un ejemplo hermoso de las características que debe tener mi vida de cristiano: escucha atenta, obediencia pronta y vida cristocéntrica.
Por un lado, José, me maravilla la capacidad que tienes de descubrir la voz de Dios aun en una cosa que podría parecer tan pequeña y banal como lo es un sueño. Tú estás atento a la voz de Dios en cada momento.
¡Qué contraste con mi vida! A menudo yo le pido a Dios que me muestre su voluntad… pero le pido que sea con grandes señales, con cosas extraordinarias que no dejen lugar a la duda. Y por esperar esas cosas grandes, muchas veces no soy capaz de reconocer la voluntad de Dios en el pobre que pide limosna en la calle, en el silencio de mi oración, en aquél que se encuentra a mi lado y necesita un consejo, o solamente ser escuchado.
Tú, José, escuchas y obedeces con prontitud. No pones excusas ni quejas… ¡Ni siquiera pides más explicaciones! Obedeces, ya que confías en que Dios sabe lo que hace aunque tú no lo entiendas.
¡Y yo, en cambio, tantas veces siento a Dios en el banquillo de los acusados! No me canso de preguntarle – y en ocasiones, casi de exigirle – el porqué de su actuar. No consigo aceptar su voluntad pues tantas veces estoy tan aferrado a mi manera de pensar, a mi modo de hacer las cosas, que me quejo y quisiera corregirle la plana a Dios. Si obedezco, tantas veces lo hago a regañadientes y no con la prontitud con la que Tú obedeces.
José, Tú escuchas y obedeces porque quieres defender a Jesús y a María sin importar lo costoso que sea. Tú vives para custodiarlos, vives para ellos. Para ti, Jesús lo es todo y no permites que nada ni nadie te lo quite… ¡Preferirías primero perder la vida a perder a Jesús!
¿También yo sería capaz de hacer lo mismo? Me ruboriza recordar todos mis pecados, que no son otra cosa que el haber entregado a Jesús a Herodes, es decir, a mis pasiones, a mis apetitos, a mis egoísmos. ¡Tantas veces he permitido que las tentaciones me arrebaten a Jesús!
Querido José, tú sabes que no quiero perder nunca más a Jesús de mi vida. Intercede por mí ante Jesús para que Él me conceda la gracia de imitar tu ejemplo de vida santa. Defiéndeme de todos aquellos que quieran apartarme de Jesús y María, y pídele a Dios que algún día pueda llegar a estar con ustedes en el cielo.
«A cada uno de ustedes, y de nosotros, porque yo también soy hijo de una familia, nos entregan en plan de Dios para llevarlo adelante. El a?ngel del Sen?or le revelo? a Jose? los peligros que amenazaban a Jesu?s y Mari?a, obliga?ndolos a huir a Egipto y luego a instalarse en Nazaret. Asi? tambie?n, en nuestro tiempo, Dios nos llama a reconocer los peligros que amenazan a nuestras familias para protegerlas de cualquier dan?o. Y estad atentos, estad atentos con las nuevas ideologías colonizadoras. Existen colonizaciones ideológicas que buscan destruir la familia. No nacen del sueño de la oración, del encuentro con Dios, de la misión que Dios nos da. Vienen de afuera, por eso digo que son colonizaciones, no perdamos la libertad de la misión que Dios nos da, la misión de la familia.»
(Homilía de S.S. Francisco, 16 de enero de 2015).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Hoy voy a rezar una oración a san José.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Jesús, te doy gracias de todo corazón por este momento que me regalas para tener un encuentro personal contigo. Amado Jesús, creo en Ti. Creo que te has hecho hombre porque me amas y quieres que yo también te amé. Confío en Ti. Confío en que puedo abandonarme en tus manos. Confío en tus obras, pues aunque no siempre las entienda, sé que Tú sólo quieres y haces lo que es mejor para mí. Te amo, Jesús, por ser Tú quien eres y porque me amas así como soy. Gracias por todo, Jesús.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Mateo 2, 13-18
Después de que los magos partieron de Belén, el ángel del Señor se le apareció en sueños a José y le dijo: "Levántate, toma al niño y a su Madre, y huye a Egipto. Quédate allá hasta que yo te avise porque Herodes va a buscar al niño para matarlo".
José se levantó y esa misma noche tomó al niño y a su Madre y partió para Egipto, donde permaneció hasta la muerte de Herodes. Así se cumplió lo que dijo el Señor por medio del profeta: De Egipto llamé a mi hijo.
Cuando Herodes se dio cuenta de que los magos lo habían engañado, se puso furioso y mandó matar, en Belén y sus alrededores, a todos los niños menores de dos años, conforme a la fecha que los magos le habían indicado.
Así se cumplieron las palabras del profeta Jeremías: En Ramá se ha escuchado un grito, se oyen llantos y lamentos: es Raquel que llora por su hijos y no quiere que la consuelen, porque ya están muertos.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
Obedecer con prontitud, porque se confía.
San José, hoy te miro en el Evangelio y encuentro en ti un ejemplo hermoso de las características que debe tener mi vida de cristiano: escucha atenta, obediencia pronta y vida cristocéntrica.
Por un lado, José, me maravilla la capacidad que tienes de descubrir la voz de Dios aun en una cosa que podría parecer tan pequeña y banal como lo es un sueño. Tú estás atento a la voz de Dios en cada momento.
¡Qué contraste con mi vida! A menudo yo le pido a Dios que me muestre su voluntad… pero le pido que sea con grandes señales, con cosas extraordinarias que no dejen lugar a la duda. Y por esperar esas cosas grandes, muchas veces no soy capaz de reconocer la voluntad de Dios en el pobre que pide limosna en la calle, en el silencio de mi oración, en aquél que se encuentra a mi lado y necesita un consejo, o solamente ser escuchado.
Tú, José, escuchas y obedeces con prontitud. No pones excusas ni quejas… ¡Ni siquiera pides más explicaciones! Obedeces, ya que confías en que Dios sabe lo que hace aunque tú no lo entiendas.
¡Y yo, en cambio, tantas veces siento a Dios en el banquillo de los acusados! No me canso de preguntarle – y en ocasiones, casi de exigirle – el porqué de su actuar. No consigo aceptar su voluntad pues tantas veces estoy tan aferrado a mi manera de pensar, a mi modo de hacer las cosas, que me quejo y quisiera corregirle la plana a Dios. Si obedezco, tantas veces lo hago a regañadientes y no con la prontitud con la que Tú obedeces.
José, Tú escuchas y obedeces porque quieres defender a Jesús y a María sin importar lo costoso que sea. Tú vives para custodiarlos, vives para ellos. Para ti, Jesús lo es todo y no permites que nada ni nadie te lo quite… ¡Preferirías primero perder la vida a perder a Jesús!
¿También yo sería capaz de hacer lo mismo? Me ruboriza recordar todos mis pecados, que no son otra cosa que el haber entregado a Jesús a Herodes, es decir, a mis pasiones, a mis apetitos, a mis egoísmos. ¡Tantas veces he permitido que las tentaciones me arrebaten a Jesús!
Querido José, tú sabes que no quiero perder nunca más a Jesús de mi vida. Intercede por mí ante Jesús para que Él me conceda la gracia de imitar tu ejemplo de vida santa. Defiéndeme de todos aquellos que quieran apartarme de Jesús y María, y pídele a Dios que algún día pueda llegar a estar con ustedes en el cielo.
«A cada uno de ustedes, y de nosotros, porque yo también soy hijo de una familia, nos entregan en plan de Dios para llevarlo adelante. El a?ngel del Sen?or le revelo? a Jose? los peligros que amenazaban a Jesu?s y Mari?a, obliga?ndolos a huir a Egipto y luego a instalarse en Nazaret. Asi? tambie?n, en nuestro tiempo, Dios nos llama a reconocer los peligros que amenazan a nuestras familias para protegerlas de cualquier dan?o. Y estad atentos, estad atentos con las nuevas ideologías colonizadoras. Existen colonizaciones ideológicas que buscan destruir la familia. No nacen del sueño de la oración, del encuentro con Dios, de la misión que Dios nos da. Vienen de afuera, por eso digo que son colonizaciones, no perdamos la libertad de la misión que Dios nos da, la misión de la familia.»
(Homilía de S.S. Francisco, 16 de enero de 2015).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Hoy voy a rezar una oración a san José.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

SANTORAL DE HOY MIÉRCOLES 28 DE DICIEMBRE DEL 2016

Mattía Nazarei, Beata
Abadesa Clarisa, 28 Diciembre
Catalina (Caterina) Volpicelli, SantaCatalina (Caterina) Volpicelli, Santa
Fundadora, 28 de diciembre
Gregorio (Hryhorij) Khomysyn, BeatoGregorio (Hryhorij) Khomysyn, Beato
Obispo y Mártir, 28 de diciembre
Gaspar de Búfalo, SanGaspar de Búfalo, San
Presbítero y Fundador, 28 de diciembre
Los Santos InocentesLos Santos Inocentes
Fiesta Litúrgica 28 de diciembre
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